Del Sáhara y Camboya, a Jaén
Detuvo su mirada, para sus primeros documentales, en lugares y culturas tan distantes y diferentes como el Sáhara, Palestina y Camboya. Y durante este viaje por el mundo, la realizadora jiennense miró hacia sus raíces y tuvo claro que su tierra sería protagonista de su primer largo documental. Es Tiempo entre olivos, que está en fase de postproducción. Para su difusión internacional, Fany de la Chica lanza una campaña de crowfunding.

“Después de haber pasado algunos años grabando en otros países y realizando documentales sobre otras culturas, un día sentí la llamada de mis propias raíces. Me sentí responsable de dedicar mi tiempo y experiencia en hacer una película sobre mi cultura y los problemas que afronta”, recuerda. Y uno de sus problemas es el de la rentabilidad del oliviar, sobre todo, en una zona como la Sierra de Segura: “Allí los olivareros tienen más dificultades para hacer rentable el negocio por la naturaleza del terreno motanoso y por eso decidí irme allí a grabar”. Y así hizo de Orcera y la familia de Aniceto y Dominga protagonistas de este documental.
“Todos los recuerdos de mi infancia han tenido lugar alrededor de olivos. Siento pasión por mi cultura y su patrimonio y me siento responsable de retratar los cambios que ahora están sucediendo tan rápido en torno a esta actividad. Quiero compartir esta pasión con el público y también, en cierto modo, promover mi cultura y sus costumbres ”, destaca. Y para trasladar este mensaje a Tiempo entre olivos, Fany de la Chica ha contado con un equipo de profesionales de lo más completo. Son Andrew Philips, como editor; el también jiennense Antonio Blanca, como responsable del sonido; Patricia Puertas, en las labores de marketing; Roxana Martínez —jiennense residente en París— como directora de arte e infografista, y el reconocido pianista Dorante, que firma la música del documental.
En estos días, arrancará la campaña de crowfunding con la que intenta buscar apoyos para difudir el documental. La llevará por todo el mundo para ver si recoge tan buenos frutos como sus anteriores trabajos. Su primer cortometraje documental Viaje de ida y vuelta fue preseleccionado para los premios Goya y emitido en TVE. El segundo, Un día en Smara fue seleccionado en más de 30 festivales internacionales y ganó varios premios, como la mención especial, en el Festival de Documental Internacional de Londres, en su edición de 2011. Y The Visit, se vio en Canadá y el Festival de Málaga.
Mientras, Fany de la Chica continúa trabajando sin tregua. En los próximos meses, se trasladará a Nueva York, ya que la han seleccionado para estudiar un máster en la Columbia University en Dirección y Guion de Cine.