“Del más puro sentido común”

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, lo ha dicho claro y diáfano: La repatriación del sacerdote infectado por el virus del ébola era “del más puro sentido común”. Después de tanto debate y polémica social como ha generado esta decisión, y sobre el coste de traer a los dos misioneros españoles desde Libia, lo que queda es la frase tan elocuente y, a mi juicio, tan verdadera. Hasta ahora, el jefe del Ejecutivo, como buen gallego que es, había permanecido callado, o dando evasivas en algunos momentos, mientras desde otros partidos se intentaba sacar provecho desde el punto de vista político de esta desgracia. Pero no creo que su silencio fuera porque se lo estuviera pensando, porque a raíz de sus palabras, queda demostrado que lo tenía muy claro. Callaba, seguramente, por pura prudencia, y eso ha generado que intenten sacar “tajada” de la circunstancia unos cuantos irresponsables, que desde luego, han quedado en evidencia.