Defensa enconada del centro social de Las Fuentezuelas
No vamos a dejar que nos cierren el centro social del barrio y a consentir que nos sigan quitando derechos sin dar la batalla”, advirtió Mónica Ávila, entre el clamor ciudadano que, a las puertas de este “anexo” que el Centro Municipal de Servicios Sociales de Peñamefécit tiene en Las Fuentezuelas, reivindicaba su apertura inmediata. Niños, ancianos y personas con algún grado de discapacidad, entre otros, alzaron la voz por que estas instalaciones, que atienden a “unos 400 usuarios”, no estén cerradas ni un día más. Es lo que también reclamaron ayer los miembros del PSOE y los representantes de la asociación de vecinos Fuente del Árbol, que, mañana, se lo pedirán, en persona, a la mismísima concejal de Asuntos Sociales.
No obstante, Reyes Chamorro ya anunció, en un comunicado, el lunes, que el Ayuntamiento reabrirá este “anexo tras la Feria de San Lucas, tal y como ya fue comunicado hace días por parte de la dirección del centro a los vecinos y usuarios de esta instalación”. “[Las dependencias] no están cerradas, sino que, por la reorganización del desarrollo de los talleres y demás actividades que se realizan en ellas, estas se han venido realizando de manera puntual en el Centro Municipal de Servicios Sociales de Peñamefécit como consecuencia del verano”. Pero los vecinos “no se tragan” estos argumentos. El tesorero de “Fuente del Árbol”, Miguel Ángel Martínez, cuestionó una de las explicaciones que se habían dado anteriormente, la de una supuesta falta de personal, cuando —recordó— el Ayuntamiento tiene una plantilla de casi 1.500 trabajadores.
Pero esta no es toda la crítica que hacen los vecinos. Según indica el PSOE en otra nota, las dependencias se han cedido a un particular que ofrece clases de baile en las que participa incluso alguna concejal del Partido Popular, siendo esta una actividad restringida a quienes paguen por ella y no permite que el centro esté abierto a cualquier otro evento”.
Esta no es la primera vez que cierra el centro social de Las Fuentezuelas, pero, en los últimos años, su funcionamiento había estado ligado al tiempo que dura el curso escolar, explicó Ávila. “En él se imparten talleres de memoria, baile, yoga o pilates, y lo necesitamos”, clamó la portavoz de este movimiento ciudadano que ha emprendido, incluso, una campaña de recogida de firmas para que el Ayuntamiento “dé un paso atrás” y les “dé la razón”.