Desafío en la Tacita de Plata

El cuadro de Terrazas visita el campo del líder con el objetivo de frenar la imparable trayectoria del Cádiz CF y mantener su posición de privilegio en la tabla
El Real Jaén se somete hoy a una prueba de fuego con su visita al Cádiz CF, líder del grupo IV. Los jiennenses se desplazan a la Tacita de Plata con el reto de frenar la trayectoria de los gaditanos y mantenerse en los puestos de privilegio de la clasificación.
  José R. Casado / Jaén
El compromiso resulta especial por su amplia gama de alicientes, desde el peso de los contendientes hasta la magnitud del escenario. El Estadio Ramón de Carranza es un campo que forma parte de la historia del fútbol español. Sobre su césped se han vivido gestas, decepciones y acontecimientos que están grabados en la memoria futbolística. Allí desplegó sus alas, por primera vez,

    13 dic 2008 / 23:00 H.

    un “Buitre” que dio nombre a una quinta irrepetible. En sus vestuarios, un genio mágico y bohemio de El Salvador llegó a dormitar en un descanso durante una de sus clases magistrales. Pocos años atrás, el Carranza contempló la irrupción de un malabarista brasileño que, con el paso del tiempo, se vio apagada porque al fútbol no se juega en bicicleta. Hasta los seguidores que acuden fieles a sus gradas se ganan, por arte y merecimiento, la distinción de ser la mejor afición de España. No les importa la categoría, sólo un color, el amarillo.
    Sobre este trozo de historia juega hoy el Real Jaén de Carlos Terrazas. El equipo pone el broche a una semana particular, con clásico de por medio ante el CD Linares, en la guarida del líder. Los jiennenses afrontan el siguiente desafío en la etapa reina de la Liga, aquella que encadena al Real Betis B (0-0), el Cádiz, el Marbella y el Poli Ejido. El balance final no sólo servirá para calibrar la valía del Real Jaén, sino también la de sus adversarios. Para el encuentro de esta tarde, y tras las rotaciones llevadas a cabo en Linarejos, la lógica sugiere que Terrazas alineará el once habitual de las últimas jornadas. Salvo la entrada de Castellanos por Fabios, no caben más intrigas en el resto de líneas, con la dinamita arriba de Geni y Arriaga, y el despliegue por el ala izquierda de Calderón, futbolista que vive su mejor momento con la camiseta blanca. El equipo se agarra a su solidez defensiva—trece goles en contra— y a su trayectoria a domicilio —una derrota en ocho salidas— para acudir al Carranza impulsado por una ráfaga de autoestima. La plantilla evita complejos y apuesta por la victoria, pese a que sólo el Conquense (2-3) y el Marbella (3-3) lograron salir indemnes del fortín amarillo, un campo donde el Real Jaén ha vencido en cuatro ocasiones a lo largo de su historia. Conviene aferrarse, por tanto, al reciente signo de debilidad del rival como local con su eliminación copera, el pasado jueves, a manos del Granada (2-3).
    Si en el equipo visitante sobresale su armazón defensivo, el peligro del Cádiz radica en su poderío atacante. El conjunto de Javi Gracia ofrece una estadística demoledora, con treinta y nueve goles en dieciséis jornadas, y sólo diecisiete en contra. El argentino Toedtli, con diez tantos, es uno de los responsables de convertir, hasta el momento, el descenso a los infiernos en un sendero despejado de obstáculos. De hecho, los gaditanos sólo han cedido una derrota y dos empates en su regreso a Segunda División B. Hoy, no obstante, pueden incurrir en un error si menosprecian la talla de su oponente. La competitividad y la solvencia que derrocha el Real Jaén en la presente campaña se traducen en autoridad como visitante. De ahí que ganar en el Carranza diste mucho de ser una utopía.