Cuatro empresas pugnan por reforman las zonas infantiles
Tendrían que ser espacios de recreo y esparcimiento donde los niños pudieran jugar a sus anchas y los padres, respirar tranquilos, con garantías de que sus hijos están seguros. Pero ni lo uno ni lo otro ocurre en la mayoría de las zonas infantiles de la capital.

Para empezar —resume la presidenta de la Federación de Vecinos Objetivos Comunes (OCO), María Cantos—, “son escasas”. Y, salvo contadas excepciones, como las de la Plaza Empresario Diego Torres o la glorieta de Jaén por la Paz, donde sus áreas de juego hace escasos meses que se estrenaron, la mayor parte de las que existen reflejan el deterioro derivado de “años” sin un mantenimiento continuado.
De norte a sur y de este a oeste de la capital, los ejemplos sobran. El Parque de la Concordia o las áreas de juegos que hay habilitadas en San Felipe o a las espaldas del Convento de las Bernardas, en San Ildefonso, son solo algunos. Y de la misma forma que abundan las pruebas así han proliferado —y continúan haciéndolo— las quejas de los ciudadanos y de la oposición. En Peñamefécit, la presidenta de “La Guita”, Isabel Navarro, cita el arreglo de la zona infantil de la Plaza Federico García Lorca como “la principal” reivindicación de la asociación.
Hace varios años que denuncian el estado de su asfaltado, “comido” de agujeros, y piden su remodelación. “Hemos mandado escritos al Ayuntamiento y hasta un proyecto”, dice Navarro, en el que solicitaban, entre otros, una mesa de pin-pon, un espacio para el juego de petanca, mesas y aparatos de gimnasia para los mayores. Pero, “como no hay dinero” —se lamenta la dirigente vecinal—, cualquier demanda de este tipo se ha quedado en un cajón a la espera de que, quizá ahora que la adjudicación del proyecto municipal para rehabilitar “todas” las zonas infantiles de la ciudad está a la vuelta de la esquina, pueda llegarle el momento.
Coincidiendo con las elecciones municipales del mes de mayo, el Ayuntamiento sacó a licitación el pliego de condiciones técnicas y administrativas para la remodelación integral de estas áreas. El proyecto está basado en un estudio previo de la situación de estos espacios, así como los lugares en los que hay que intervenir, y su presupuesto asciende a 244.000 euros. El 6 de julio finalizó el plazo para que las empresas presentaran ofertas técnicas y económicas y, según pudo saber este periódico, lo hicieron cuatro, procedentes de Sevilla, Málaga, Murcia y La Coruña.
La mesa de contratación se reunió 21 días después, pero no estaba el informe sobre la adecuación de la documentación técnica y administrativa de las empresas que quedó pendiente para después de vacaciones. Es lo único que falta para adjudicar unos trabajos que padres, niños y abuelos esperan como agua de mayo.