Cuando la política es escoria

Mientras no meta mi mano en tu llaga. ¡Oh Santo Tomás! Llegaste a decir. Lo bueno del caso es que somos los dos igual de desconfiados en el día de tu santo. Y como nosotros, la retahíla que puede dar la vuelta a España cinco veces de manos cogidas. Juradores sobre la Biblia, resignados de comunión diaria, reconvertidos en delincuentes de medio pelo y puteros de lo llano en el primer club de alterne.

    28 ene 2013 / 16:01 H.

    Bueno están haciendo a Zapatero, los que le acusaban de dejar a España sin un duro. Ahora resulta, que la pasta se la repartía la derecha pura dura, presuntamente, y la que no, pues el tesorero del AP y sucedáneos después, la reconvertía en Suiza en montañas de chocolate. Cojones, debe haberlos, cuando el tercer presunto mangante, Luis Bárcenas, quise decir tesorero del PP, apiló en Suiza 22 millones de euros, una vez salvados los regalos de complacencia, más de cinco mil euros por barba o bigote, a los parroquianos en sobre tipo boda. Y aquí donde a Tontoro, parece ser que también le ha “lavado”, algunos tejos, nos deja a todos boquiabiertos y con la resignación de que Hacienda no somos todos, sino tontos. Aunque bueno, “la mula”, cazatalentos ahora y las otras dos gobernantas, se ganan el sueldo mintiendo y recortando. Por otro lado, el gobernador de las islas Salomón, don Mariano, que quiere hacer un pacto anticorrupción. Sería necesario dejar de ser tan generoso con algunos indultos, menos recortes, más justicia social, más sanidad pública, y hacerle a los ministros los trajes sin bolsillos. Que no se quejen de la educación. Damos a nuestros hijos, mejor que la que ustedes pagan.
    Nicolás Ortiz