Cuando la batería es pasión

Son muchos los frentes abiertos y a todos los atiende con entusiasmo y verdadera devoción, pues solo así puede permitirse vivir haciendo lo que más le gusta: tocar la batería.
Nano Díaz es miembro fundador de Xkrude, el grupo jiennense de metal, de la granadina Banda del Trapo y de la Red Soul Community, una formación de reconocido prestigio en Europa, con la que el jiennense realiza las giras anuales por las principales ciudades del continente y ha formado parte de los conciertos  por España de Roy Ellis y Chris Murray. Además, participa en otras bandas de diferentes estilos musicales y, como batería profesional, acompaña a los cantantes y grupos que lo requieren. Y, por si fuera poco, es batería de sesión, músico de directo, imparte seminarios, master class y clases y graba percusión en su propio estudio de Granada llamado Live Bunker Records. Aún hay más, Nano Díaz acompañará a la cantante alcalaína Roko en la gira que realizará este año con su nuevo disco, que empezará a grabar el próximo lunes. También está entusiasmado con el recién creado grupo de flamenco-rock granadino Fausto Fandango, del que es batería. Lo último que ha hecho es crear una página web (www.nanodiaz.com) con información sobre sus conciertos y trabajo. “Esta es una forma de profesionalizar lo que hago —explica—, pues cuando te llama un artista tienes que darle unos avales y en la web puede ver mi trabajo con diferentes artistas”.
Nano Díaz lleva más de 17 años en el mundo de la música. Comenzó con la banda jiennense Clown, que tuvo repercusión, en el ámbito nacional, tras ganar los certámenes Lagarto Rock, Villa de Bilbao y ser finalista en el certamen de música andaluza. Aunque lo de tocar la batería le viene desde niño por línea paterna, Nano Díaz comenzó los estudios universitarios de Matemáticas pero los abandonó cuando comprendió que lo suyo era la música. Aprendió bajo la tutela del percusionista y batería Miguel Morales de la Escuela Groove. A lo largo de su carrera profesional, Nano Díaz ha grabado más de treinta discos, además de material de DVD y videoclips. “Lo más difícil es conseguir que las cosas cuadren. Para ello hay que estar al 200 por cien. Hay que compaginar el estudio de grabación con los ensayos con las diferentes bandas y las giras con unos y con otros. Cuando coinciden los conciertos no tengo más remedio que recurrir a sustitutos”, aclara.