Crédito para no malvender el aceite

Amayor precio del aceite, mayor renta para el olivarero y, por lo tanto, mayor riqueza para la provincia. Esa es la premisa desde la que parte la Caja Rural de Jaén para dar un paso adelante y poner en marcha una herramienta financiera al servicio de las almazaras de la provincia para que no malvendan su oro líquido. Se trata de una nueva línea de crédito destinada a la inmovilización de aceite y que ya está disponible en las 150 oficinas de la entidad, tal y como anunció ayer su director general, Enrique Acisclo.

30 jul 2014 / 22:00 H.


¿Qué ha llevado a la Caja Rural a diseñar ese producto? Desde el 3 de junio, el precio se ha incrementado de forma notable, en torno a un 35 por ciento debido, fundamentalmente, a dos factores: el primero es que tres cuartas partes de la última campaña están ya vendidas gracias, sobre todo, al magnífico comportamiento de las exportaciones. El segundo vector es que el sector estima que la cosecha que se avecina no será tan buena y que se prevé una producción corta. La unión de ambas circunstancias puede hacer que el precio del aceite de oliva siga subiendo.


Y es ahí donde entra en juego la Caja Rural de Jaén con una nueva herramienta que permite a los olivareros “aprovechar ese incremento”. ¿Cómo? Guardando el aceite en las bodegas hasta que las condiciones del mercado sean más favorables. Esto es, hasta que el precio suba tal y como parece que ocurrirá. Mientras tanto, la entidad financiera adelanta el dinero, en unas condiciones favorables, para que la almazara pueda pagar a sus cosecheros. “Nuestro objetivo es facilitar a los olivareros cualquier arma que les permita incrementar la rentabilidad”, subrayó Acisclo.
El director general explicó que la línea de crédito tiene una duración de hasta nueve meses, lo que permitirá enlazar las campañas y ver, de este modo, las producciones definitivas. Además, también se permite la cancelación anticipada del producto para el caso de que el precio del mercado aconseje mover el producto, es decir, vender el aceite. “Lo hemos diseñado de la forma más ágil posible para el agricultor y la almazara”, añadió.


Enrique Acisclo aclaró que el impacto de esta medida será difícil de cuantificar: “No sabemos realmente cuáles son las existencias reales que están disponibles. El 70 o 75 por ciento de la producción está vendida o comprometida, con precios ya fijados. Queda un 25 por ciento. No somos nadie para decirle al agricultor que no venda. Solo le ofrecemos la posibilidad de conseguir una mayor rentabilidad”, aseguró el responsable de la entidad financiera.
La línea de crédito vendría acompañada, además, de unas condiciones económicas especiales que ofrecería a las almazaras el Patrimonio Comunal Olivarero en las tarifas para almacenar el aceite en sus bodegas mientras esté inmovilizado.
Enrique Acisclo entiende que los actuales precios todavía no son preocupantes para el sector. Ahora bien, alertó que una subida desmesurada podría tener un efecto negativo, ya que causaría un descenso de la demanda: “Es un consumo que costaría mucho recuperar. Un precio excesivo no interesa”, concluyó el director general de la Caja Rural de Jaén.