Codicia bancaria
Manuel Pérez Rafecas desde Jaén. Codicia: deseo o apetito ansioso y excesivo de bienes o riquezas. (Diccionario de la RAE). El desmesurado afán de enriquecimiento que están demostrando algunas entidades bancarias llega a límites impensables, sin que nada ni nadie ponga freno a tales desmanes. Manifiesto públicamente mi repulsa a algunas medidas adoptadas a espaldas de los usuarios, sin previo aviso de las mismas a sus clientes y con absoluto desprecio a las cláusulas de contratación que firmamos al abrir una cuenta.
Desde hace años dispongo de una tarjeta de débito vinculada a mi cuenta corriente en una caja de ahorros; dicha tarjeta pertenece a la red Euro 6000. Si la utilizo para realizar un reintegro en un cajero automático de esa caja de ahorros, la comisión es de 0,0 euros; si la utilizaba en otra entidad bancaria de dicha red Euro 6000, la comisión era de 0,80 euros. Cual ha sido mi sorpresa e indignación cuando recientemente, al realizar una operación de reintegro en dicha red, la comisión ascendió a ¡3,6 euros! Es decir, que la comisión se ha incrementado en un ¡450 %!. Entiendo que el uso de estos servicios tienen un costo y que debemos asumirlos, pero no hasta esos niveles y mucho menos sin que los “clientes” seamos advertidos del cambio en las condiciones de uso de una tarjeta bancaria (que también abonamos aparte). No solo hemos tenido que aportar todos los ciudadanos, a través del Gobierno y vía de dinero público, los déficits generados por una inoperante e ineficiente gestión de estas entidades, acompañada de retribuciones “mareantes” a sus altos directivos, sino que tenemos que soportar una desmedida codicia que pretende el enriquecimiento rápido mediante un coste desmedido de los servicios que prestan a costa de la indefensión y la impotencia de sus sufridos clientes, con la aquiescencia de determinada clase política a la que sí le condonan deudas.