Catedral de Jaén
Plácido Cabrera Ibáñez desde Jaén. Faltan pocos meses para que llegue a Jaén la representación de la Unesco, la opinión de sus funcionarios será decisiva para que nuestra catedral pueda ser incluida como Patrimonio de la Humanidad. Para afrontar este reto, la actual corporación municipal se encuentra en una situación muy problemática, no sólo por su delicada situación financiera.
Las costosas obras realizadas en la Plaza de Santa María y sus alrededores, se han deteriorado de manera significativa en muy poco tiempo, por lo que ya han necesitado efectuar varias reparaciones. Para contribuir a la conservación, mantenimiento y limpieza de esta zona emblemática, no parece que sea lo más conveniente permitir que frecuentemente se convierta en lugar para jugar al fútbol, o transitada por todo tipo de animales. Uno de los efectos que ayudará a la buena marcha de los resultados del estudio, podría ser que los funcionarios de la Unesco puedan comprobar que este proyecto cuenta con un alto respaldo social y público. Por este motivo, pienso que sería necesario una mayor altura de miras de todos los organismos, en especial de nuestra Diputación y de la Junta de Andalucía, también de las organizaciones empresariales, vecinales, etcétera. Involucrándose y colaborando de forma más activa y significativa para resolver aquellas deficiencias que puedan ser necesarias corregir, porque lo que está en juego es algo muy importante para nuestra ciudad y provincia, no solo para el momento actual, sus beneficios y efectos permanecerán en el futuro.