Calles y plazas se "visten" de primavera con la fiesta de las Cruces

Una celebración tradicional que se mantiene viva por muchos años que pasen. Los linarenses se echaron a la calle durante la jornada festiva, en la que el buen tiempo fue uno de los principales protagonistas, para disfrutar del primer día de las tradicionales fiestas de las Cruces de Mayo. Esta es una cita esperada por muchos vecinos, y prueba de ello es que en esta nueva edición son 21 los monumentos que se pueden contemplar en diferentes calles y plazas de la ciudad, hasta el próximo domingo. La gran mayoría están confeccionadas por asociaciones vecinales y cofradías, que durante estos días intentan paliar sus maltrechas economías con las barras instaladas y con su duro trabajo. Con el dinero recaudado, dispondrán de una mayor solvencia para hacer frente a sus proyectos.

01 may 2014 / 22:00 H.


Pero las cruces también se pueden disfrutar en otros emplazamientos, como centros de mayores, parroquias, colegios, complejos de hostelería, pubs y tabernas. Incluso grupos políticos y particulares, entre otros colectivos, levantaron una. En cuanto a la distribución geográfica, prácticamente todas están en el casco antiguo, donde el colorido y el ambiente aviva las calles y plazas del tranquilo barrio histórico.
Concurso. Además de vecinos y numerosos visitantes, que aprovecharon el puente festivo para conocer los atractivos de la ciudad, entre los que se acercaron a las diferentes cruces se encontraban los integrantes del jurado del tradicional concurso organizado por la Comisión Municipal de Festejos, en colaboración con la Agrupación de Hermandades y Cofradías y la Federación de Asociaciones de Vecinos Himilce.El principal objetivo de la iniciativa es fomentar que cada rincón, plaza o calle sea un punto de encuentro para los vecinos. La meta, sin duda, se cumplió al cien por cien durante la primera jornada. Ahora, las vistas están puestas en el fin de semana, para que la diversión y el buen ambiente no decaigan ni un minuto.
El certamen estipulaba que el colorido y la técnica quedara a iniciativa de los participantes, lo que contribuyó a conseguir una gran variedad en la decoración de las cruces. En principio, los únicos requisitos fundamentales de la representación eran la ornamentación de flores y colocar macetas u otros elementos tradicionales o de carácter ornamental. Para determinar los premios, cuyo fallo se hizo público ayer, los criterios a tener en cuenta se basaron, según explican desde el área de Festejos, tanto en la decoración natural de la cruz como en la variedad floral, la iluminación, el aprovechamiento de los elementos existentes en el entorno. En el fallo también influyó el esfuerzo e interés demostrados por los vecinos o por las agrupaciones para mantener la tradición.
Además de los tres galardones representativos y diploma para cada una de las tres cruces que obtuvieron la puntuación más alta del concurso —Unión Vecinal Travesía de la Encina, el Nazareno y Parroquia del Pilar—, se entregó un accésit para la hermandad de la Columna, que tiene la cruz en el interior de su casa de hermandad. Además, se concedieron otros tres diplomas y trofeos para las cruces infantiles. Los galardonados fueron la Oración en el Huerto, la Travesía de la Encina y la hermandad del Rescate. Ahora, los monumentos ganadores lucen orgullosos, hasta el domingo, la distinción y el esfuerzo por mantener viva la tradición.