Pasado y futuro
La historia del Partido Popular no se puede escribir sin su testimonio. Gabino Puche Rodríguez-Acosta (Baeza, 1949) forma parte del pasado, del presente y, sobre todo, del futuro. Es un dirigente clave en la derecha andaluza, un político con mayúsculas en la fuerza política que él mismo fundó y un jiennense con infinita cuerda para dar “guerra”. Su nombre suena con fuerza a poco más de un mes de las elecciones europeas. Miguel Arias Cañete apostó por él para viajar juntos a Estrasburgo y, aunque costó buscar acomodo a tres andaluces en la candidatura, el esfuerzo tuvo su recompensa.

El baezano está posicionado en un lugar, el 23, en el que resulta una incógnita su marcha al Parlamento Europeo. De los votantes dependerá su permanencia en el Congreso o el salto a otra forma de hacer política. Él, acostumbrado a hacer y deshacer maletas, está convencido de que no habrá 24 europarlamentarios de su partido, como hasta ahora, sino 30. Confía ciegamente en que las urnas lo harán “volar” a Europa y de que convertirán en comisario al todavía ministro, con quien mantiene una estrecha relación. Lo cierto es que en sus vidas políticas siempre hubo cierto paralelismo. Los dos dirigieron Alianza Popular en sus respectivas tierras de origen y ambos están considerados “barones” del Partido Popular.
Gabino Puche fue uno de los fundadores en Jaén de aquella vieja agrupación en una época en la que había serias dificultades para cambiar las miras del electorado. Fue el entonces presidente de la Diputación, Miguel Sánchez-Cañete, quien lo persuadió hasta conseguir meterlo en “verea”. Tanto trabajo empezó a dar pronto sus frutos. El economista empezó como secretario general en la provincia y no paró hasta convertir la política en una profesión. Tuvo el honor de ser el último presidente de las siglas AP y el primero de las PP en Andalucía. En su trayectoria orgánica no cabe un alfiler. Tampoco en la institucional, aunque de todos es sabido que su batalla es más interna que de cara a la galería.
Manuel Fraga, Antonio Hernández Mancha y José María Aznar fueron algunos de los “líderes” que fijaron su mirada en él. Al baezano se le atribuye la escalada ascendente que tomó el partido desde las primeras elecciones autonómicas. Tanto éxito lo elevó hasta convertirse en candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía. No tuvo la suerte de ganar aquellas elecciones, pero sí de trabajar por su tierra desde la oposición. Parlamentario, senador, diputado... No hay cargo que se le resista. Gabino Puche está dispuesto a seguir en la brecha. Llevará la voz de Jaén a Europa con la ilusión del primer día.
En corto
Las comparaciones son odiosas y, en todo caso, siempre hay distancias entre lo que ocurre hoy y lo que pasó ayer. Sin embargo, hay muchos paralelismos entre la crisis de Gobierno actual de la Junta de Andalucía y la que se dio en el Ayuntamiento de Jaén en la recta final de la pasada legislatura. El pacto entre el PSOE e IU se resintió al menos en dos ocasiones. En primer lugar, por culpa de los presupuestos municipales. Y, en segundo lugar, por un decreto municipal mediante el que Carmen Peñalver retiró las competencias de Medio Ambiente a José Luis Cano, en concreto las del área de “Jaén Sostenible”.