Los polos opuestos...

Ahora, sí. A la segunda llegará la vencida. Javier Márquez sucederá a José Enrique Fernández de Moya al frente de la Alcaldía de Jaén. Lo hará en apenas dos semanas de plazo. Se cierra un silencioso proceso de sucesión en el que la “guerra” por el bastón de mando prácticamente brilló por su ausencia. El concejal de Urbanismo, Medio Ambiente, Somuvisa y Urban no asumió esta retahíla de competencias, al comienzo del mandato, porque sí. Tener tantas responsabilidades concentradas en una sola cartera fue una especie de premonición. Estaba cantado que el alcalde de la capital buscaba acomodo desde el “principio de los tiempos” y que sería alguien de “Jaén, Jaén” su sustituto. Dice el refrán que los polos opuestos se atraen. He aquí el mayor de los ejemplos.

09 nov 2015 / 11:55 H.

Lo único que les une es la generación a la que pertenecen, la ciudad en la que nacieron y el compañerismo fraguado en la Universidad de Jaén. Más allá de la relación de amistad de la que pueden presumir, poca o ninguna coincidencia más. Perfiles distintos fáciles de visualizar, por ejemplo, en sus cuentas de las redes sociales. A José Enrique Fernández de Moya es difícil verlo en actos públicos sin corbata e, incluso, en privado resulta misión imposible hallarlo con una “alcázar” en la mano. Para quienes piensen que las apariencias engañan, hay más. El actual alcalde es un político de raza, más apegado a lo orgánico que a la gestión, y un hombre de números. Dicen de él que antes de que le saliera la barba ya estaba afiliado al PP. Javier Márquez, abogado de profesión, entró en esto de lo público por probar experiencias nuevas y, a duras penas, cambió sus despachos de abogado y de interventor del Ayuntamiento de Aldeaquemada por otro diferente en la Plaza de Santa María. Hubo más de un intento de dejar la política para huir de la complicada gestión. Fueron su marcado sentido de la responsabilidad y el apego a la tierra lo que hicieron que diera media vuelta atrás para continuar en la lucha. A él es demasiado fácil verlo sin corbata y con una “alcázar” en la mano. Es su terapia, como la de viajar, en cuanto las obligaciones lo permiten, para escapar de la rutina y aprender lo que se mueve en otros mundos. Amante de la segunda fila, lleva pocos “telediarios” en el seno del partido que lo aupará hasta la Alcaldía. Es lo que menos le importa. Lo que de verdad le interesa es trabajar por una ciudad cada vez con las cuestas más pronunciadas. Sin populismos, sin tener que rendir cuentas a nadie, alejado de las puyas y la enemistad generada por el color político.
Javier Márquez empezó el año con la propuesta de ser alcalde sobre la mesa y lo terminará, si nada ni nadie lo impide, con la vara de mando en la mano. Los caminos del Señor son inescrutables. A José Enrique Fernández de Moya no le salió demasiado bien el intento de escapar a Sevilla por culpa de la llegada de Juan Manuel Moreno Bonilla a la dirección andaluza. Las próximas elecciones generales le darán una segunda oportunidad para huir de la complicada situación económica del Ayuntamiento. Los jiennenses que lo votaron en las urnas tendrán como recompensa un cambio de estilo en la Alcaldía de Jaén.

Los números 2 y 3
Dos presidentes locales acompañarán a José Enrique Fernández de Moya en la candidatura al Congreso de los Diputados. Ángeles Isac, de Linares, será la número dos de la Lista. Javier Calvente, de Baeza, el tres. Actualmente, los populares tienen tres escaños en la Cámara Baja y los socialistas, otros tres.


En corto
Es un gran paso y un acierto político que dos administraciones llamadas a entenderse unieran posturas para intentar dar una solución a un tranvía paralizado injustamente desde hace cuatro largos años. Lástima que haya tenido que pasar tanto tiempo para regresar al punto de partida y empezar de cero los estudios de una viabilidad que puede estar abocada al fracaso si alguien no lo remedia. Si las administraciones amplían la frecuencia horaria del tranvía, es decir, si hay que esperar quince minutos para coger uno de los trenes, los usuarios optarán por otro medio de transporte e, incluso, por ir a pie. Dicen los expertos que el ahorro de dejar tres unidades en cocheras es mínimo.