Atrapado por la cláusula suelo

Francisco Reyes es uno de los miles de jiennenses atrapados por la cláusula suelo de su hipoteca. Sin embargo, este joven carnicero, casado y con dos hijos, no está dispuesto a resignarse. Presentó una demanda contra la entidad financiera en la que pedía la nulidad del interés mínimo por considerarlo “abusivo”. Hoy se celebra el juicio. “Seguro que a mí el dinero me hace más falta que a ellos. Creo que es una injusticia y no me voy a quedar de brazos cruzados”, explica. Su historia comenzó en 2009, cuando decidió comprarse una casa en el barrio de Santa Isabel y pidió un préstamo a Unicaja. “En principio, mi hipoteca no tenía cláusula suelo”, aclara este joven jiennense, de tan solo 27 años. Unos meses después, solicitó una ampliación para adquirir una cochera colindante: “Ahí ya me la colaron”, dice, de forma muy gráfica. Con esa expresión, Francisco Reyes se refiere a una cláusula suelo del 2,75 por ciento, es decir, que por mucho que baje el Euribor su cuota hipotecaria no desciende. “Estoy pagando 463 euros cada mes. Si el juez atiende mi solicitud, la letra disminuiría unos 90 euros”, explica.

24 mar 2014 / 23:00 H.


En su demanda, presentada el pasado verano, este carnicero jiennense argumenta que no fue informado convenientemente de que su hipoteca tenía un interés mínimo. Añade que no le ofrecieron otro producto distinto, que no hubo transparencia y que no le realizaron la preceptiva simulación. Por todo ello, Francisco Reyes solicita al Juzgado de lo Mercantil la nulidad de la cláusula.
El magistrado Luis Shaw celebra hoy una vista previa para decidir sobre este caso. Tendrá que escuchar a las partes, es decir, al afectado y a la entidad financiera, que podrán proponer las pruebas que consideren oportunas. Si las admite a trámite, su resolución puede tardar meses. Si las rechaza, la sentencia estará en tan solo unos días.
El Juzgado de lo Mercantil cambió el criterio a finales del pasado año y comenzó a anular las cláusulas suelo.