Atasco en el Juzgado de Familia

El Juzgado de Primera Instancia número 6 de Jaén es uno de los órganos más sobrecargados de la provincia. Tienen asumidas en exclusiva las competencias de Familia en la jurisdicción del partido judicial de la capital y, además, también resuelve otro tipo de pleitos civiles que le corresponden por el llamado reparto ordinario.

23 jul 2014 / 22:00 H.

 

Tal es el atasco que la Administración ha decidido reforzarlo con la incorporación de una nueva juez durante, al menos, seis meses. Así lo ha confirmado la presidenta de la Audiencia Provincial, Elena Arias-Salgado, quien defiende que se trata de una medida absolutamente necesaria debido al ingente número de asuntos que tramita este órgano judicial.

Seguramente, el Juzgado de Familia es una de las sedes que soporta una mayor saturación en toda la provincia. Los datos están ahí: en 2013 se registraron 2.121 asuntos cuando la carga de trabajo establecida debería oscilar entre los 908 y los 1.088 casos. Pero es que al elevado número de procedimientos que se acumulan hay que sumar la complejidad de las cuestiones sobre las que su señoría debe adoptar una decisión. En esta jurisdicción se dirimen asuntos tan sensibles como divorcios, custodia de menores, pensiones, adopciones o acogimientos que, en algunos casos, acumulan  demoras de hasta un año, según explican fuentes judiciales. “Se mueve mucho papel y se trabaja muy por encima del módulo. Por eso, ha sido necesario tomar la decisión de reforzar este juzgado con la incorporación de una nueva magistrada”, sostiene la presidenta de la Audiencia. Desde hace unos días, una juez de refuerzo trabaja codo con codo con la titular de este órgano, Sacramento Cobo. Ambas intentan sacar adelante los centenares de procedimientos que tienen pendientes y evitar, de este modo, retrasos injustificados.

 Es la segunda vez que la Administración decide incorporar una juez de refuerzo a este Juzgado en sus apenas cinco años y medio de existencia. De hecho, la magistrada María Teresa Carrasco Montoro, titular del Juzgado de Menores de Jaén, trabajó en Familia durante el segundo trimestre del año 2012. Este intento por aligerar la carga de trabajo funcionó, aunque solo a medias. Muchos lo calificaron como un parche, ya que no se consiguió desatascar esta sede judicial. De hecho, el atranque sigue a día de hoy, lo que ha hecho necesario volver a incorporar a otra togada.

De todos modos, el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía estima que la única solución viable para acabar con la sobrecarga de trabajo es que este órgano se dedique en exclusiva a los asuntos de Familia. Una solicitud que se repite año tras año y que siempre ha caído en saco roto.