Asociaciones gitanas, en pie de guerra por Castellar

Es un conflicto que perdura en la mente de aquellos que se vieron implicados. Los episodios de tensión vividos en Castellar permanecen vivos en la retina de ambas partes, hasta el punto de que los hay que se niegan a que caigan en el olvido. Es el caso del Consejo Estatal del Pueblo Gitano, que la semana pasada se reunió para analizar, expresamente, este caso y abordar las medidas que sean necesarias para evitar que hechos que califica de “racistas” y “xenófobos” se vuelvan a repetir.

24 sep 2014 / 10:01 H.

El encuentro congregó a 21 entidades de toda España. “Verdaderamente, el asunto acaba de empezar en el ámbito legal”, defiende de la Federación de Asociaciones. La Fiscalía ya anunció su intención de remitir a los juzgados de Villacarrillo las diligencias que tiene abiertas por los incidentes registrados, el pasado mes de agosto, en Castellar. El objetivo es que se sume a esta causa las denuncias de “odio racial y étnico” interpuestas por el Consejo Estatal del Pueblo Gitano. Sin embargo, este organismo da un paso más. “Llevaremos el caso al Tribunal Superior de Justicia y, en su caso, al de Estrasburgo. No nos vamos a quedar callados ni una vez más”, sentencia Juan García, delegado regional.


Los hechos objeto de la polémica se dieron a partir del 19 de agosto cuando se produjo una trifulca entre vecinos, en la que se vieron implicadas tres familias. Se registraron daños en viviendas y coches, lo que desató la tensión. A partir de ahí, se convocó una concentración espontánea de unos trescientos residentes del municipio para exigir seguridad, una petición que, posteriormente, fue avalada con la recogida de más de mil firmas. “La provincia de Jaén tiene un largo historial de brotes xenófobos y racistas en contra del pueblo gitano y es hora de ponerse, de forma seria, a trabajar en la defensa de los derechos de los gitanos”, declaró el consejo estatal. Además, en la reunión del día 15 se acordó crear un gabinete jurídico que se encargará de tramitar el caso de Castellar. Sin embargo, se quedará constituido de forma permanente para poder intervenir en otros sucesos que se puedan producir en cualquier parte del territorio español.


Por otro lado, en el Consejo Estatal se acordó que el Día de los Gitanos Andaluces se celebre en Jaén. De esta manera, se convocará una manifestación pacífica, que se espera que sea multitudinaria, para reivindicar el derecho de este colectivo y denunciar lo ocurrido en Castellar. Así, la provincia jiennense es la seleccionada para la conmemoración de la próxima efeméride.


Y es que, como recuerdan, no es la primera vez que se producen tensiones. Es una historia que parece repetirse, aunque sin llegar a al extremo de hace seis años, gracias a la rapidez de reacción de las fuerzas de seguridad. El municipio de Castellar vivió el último fin de semana de octubre de 2008 con gran tensión. Después de una pelea en el botellón, fueron atacadas las casas de los gitanos del pueblo. Precisamente, las mismas familias implicadas en la trifulca del 19 de agosto, tal y como confirmaron fuentes cercanas al caso. En 2008, estos vecinos no regresaron hasta pasados días. Poco después, el subdelegado del Gobierno central en Jaén, en aquel momento, Fernando Calahorro, anunció que se aumentaría la presencia de guardias civiles en Castellar y la Junta y la Diputación impulsaron medidas sociales. El 1 de noviembre, un millar de personas participó en una concentración “por la paz y la convivencia” en el municipio, que contaba con autorización y el visto bueno municipal. Sin embargo, la marcha degeneró en incidentes. Pedían, al igual que en esta ocasión, soluciones definitivas.