ASAJA organiza una protesta en Sevilla para la última semana de marzo
La patronal agraria Asaja ha convocado para la última semana de marzo una protesta en Sevilla del sector agrario y ganadero de toda Andalucía para pedir soluciones a la Administración "con las que se palíe la situación de extrema crisis".
La iniciativa, decidida por el Comité Ejecutivo de Asaja-Andalucía, es una respuesta a la solicitud del sector olivarero andaluz, representado por ASAJA-Jaén, que pidió a sus compañeros apoyo "para evitar la estrepitosa caída que el bajo precio al que se vende el aceite y los altos costes de producción han supuesto para decenas y decenas de explotaciones de la provincia y del resto de Andalucía", según un comunicado. Luis Carlos Valero, responsable del grupo de trabajo de aceite de oliva y gerente de Asaja-Jaén, ha agradecido el apoyo recibido por la organización reginoal y ha vaticinado que la manifestación de marzo "será una de las que hagan historia", ya que "todo el sector agrario, ganadero y silvicultor (forestal), y especialmente el olivar, se encuentran en una situación extrema y no van a dejar de luchar para que se pongan soluciones reales sobre la mesa". Entre otras medidas, Asaja-Jaén pide para el olivar un plan de reconversión urgente (similar al de la vid o el de los cítricos) que lo ayude a ser rentable ante la alta competencia que suponen las plantaciones de olivar intensivo y superintensivo. Para el olivar que no pueda reconvertirse (demasiada pendiente o difícil mecanización), exige ayudas directas, así como las suficientes dotaciones de agua para los riegos de plantaciones tradicionales e intensivas. Pide además que se deje sin efecto la nueva normativa para la contratación de jornales, que "ha sumido en el caos a la provincia en plena campaña de recolección de aceituna" y ventajas fiscales (como el gasóleo agrícola) para los agricultores. Considera que es necesario fomentar la investigación para acabar con enfermedades y plagas en el olivar, así como las campañas de promoción y apertura de nuevos mercados y exige una legislación clara que prohíba las mezclas de aceite de oliva con otras grasas vegetales y apoya la concentración del sector cooperativo y almazarero para hacer frente a la bajada de precios.