Arrolladora “fiebre del almendro”

Desde hace tiempo proliferan carteles de “Se compran almendras”. ¿Qué hay detrás de eso? Sin duda, un negocio muy rentable dados los precios altos que registra el fruto seco, animados entre otros factores, por la merma en la oferta causada por la pertinaz sequía en California, por supuesto, no tan drástica como la del oro, aunque sí bastante espectacular. Por ello, en Alcalá se vive una verdadera “fiebre del almendro”. Alentados por las elevadas cotizaciones, muy superiores a las del cereal, numerosas parcelas de tierra calma se pueblan de estos árboles, hasta el punto de que, si el fenómeno sigue, en cuestión de pocos años, el cereal —bastante menos rentable a día de hoy— quedará literalmente arrinconado en todo el término municipal.

03 nov 2015 / 12:09 H.


Según las estimaciones de la Oficina Comarcal Agraria, en la zona existían unas 35 hectáreas, a las que se han unido las alrededor de 60 plantadas en los últimos tres años. Las previsiones para este otoño-invierno apuntan a un aumento en, al menos, de otras 50. Aparte de las consecuencias económicas, el auge repercutirá en un notable cambio paisajístico.
Un ejemplo de nuevos cultivadores son Miguel Mañas y Roberto Garrido, dos vecinos de Montefrío (Granada), que acaban de plantar un millar de almendros en una superficie aproximada de 6 hectáreas arrendadas por ellos en el paraje El Pleito. Ambos se han embarcado en un proyecto en el que pretende combinar el árbol con el espárrago, otro cultivo alternativo al olivar. Se muestran ilusionados con las posibilidades de la experiencia y destacan que, a diferencia de lo que ocurría habitualmente —en los que el almendro crecía en lindes y suelos pobres— ahora se le dedican terrenos fértiles. Se opta por variedades comerciales, muy productivas y de floración tardía para evitar los riesgos por heladas primaverales. La mecanización es tal que la colocación del árbol y el tutor se hace con un tractor con GPS. La instalación del protector para impedir los daños de los conejos sí es manual.
Ante la expansión, Alberto Ruiz, de Viveros Ruiz Atero, explica que, en ocasiones, se venden a los agricultores “de forma indiscriminada” patrones, como el híbrido GF-667, muy vigoroso, pero que no recomendable para secano, y además resultan sensible al gusano cabezudo y menos longevos que el franco, el patrón que él prefiere. Por otro lado, alerta de la presencia de variedades, como la mardía, que no está investigado si funcionan bien Alcalá, donde él aconseja guara. Sobre los precios, Ruiz Atero avisa de que difícilmente se mantendrán por encima de 2 euros por kilo como este año, aunque dice que a partir de 90 céntimos el fruto ya es rentable. El experto destaca que la inversión para plantar una hectárea de almendro ronda los 2.000 eu- ros y valora la adaptación al suelo y el coste menor a otros cultivos.