Arconada: "Quiero encontrar el reto que me falta"
Llegó con una imagen impecable, como su trayectoria, acompañado del presidente, Rafael Teruel, y del director deportivo, Ramón Tejada, todos con chaqueta y corbata, como exigen las grandes ocasiones. La serenidad, la pausa y la discreción marcaron cada palabra y cada respuesta. Todo bien estudiado, con mesura, pero con optimismo. La puesta en escena de Gonzalo Arconada fue un reflejo exacto de su trayectoria. Lo ha conseguido todo en el fútbol, desde la base hasta la élite, desde Segunda a Primera. Pero le falta algo: un ascenso a la Liga Adelante. Se quedó hasta sorprendido cuando se le recordó, pero le agradó la cuestión porque asumió ese reto como un nuevo desafío. “El objetivo es encontrar ese reto que me falta, un ascenso de Segunda B a Segunda División”, llegó a decir. Reflexivo y profundo en sus respuestas, siempre fue más allá. “El objetivo siempre es ganar. Pero lo importante es qué vamos a hacer para conseguirlo. Tener el objetivo no nos dice nada. Lo fundamental es el trabajo y el día a día. Lo mío no es vender humo sino trabajar. Lo importante es la puesta en acción”, sentenció.
Arconada conoce bien los valores. “Ser humilde es básico”, reiteró. “Desde la prepotencia poca gente ha llegado al éxito y ha conseguido grandes logros. Todos nos equivocamos y, cuando uno toma decisiones, el error siempre está presente. Hay que conseguir que haya más aciertos que errores y saber convivir con esos fallos”, precisó. Y en ese contexto agradeció al Real Jaén que pensara en él. “Agradezco la decisión del club de pensar en mí para formar parte de este proyecto, que nace con mucha ilusión y que es una de las cosas que ha hecho decantarme por venir a Jaén. Esa ilusión que he percibido y, sobre todo, esas ganas de crecer y hacer bien las cosas me han convencido”. Aludió en ese aspecto al debate interno que vivió para decirse entre el Burgos y el Real Jaén. “Me siento muy querido en Burgos y estoy muy agradecido. El corazón me pedía quedarme allí, pero, en la entrevista que tuve con Ramón, me transmitió tanta ilusión que me hizo recordar etapas mías anteriores en las que he disfrutado mucho como entrenador. Me veo en el Real Jaén con muchas posibilidades de trabajo. Aquí soy una persona más para colaborar en un proyecto mientras que en Burgos el proyecto era yo y eso es lo que no me terminaba de convencer”, dijo.
Ni la austeridad que proclama el Real Jaén ni la categoría quitan un ápice de ilusión a Arconada. “La vida son retos y tenemos que aceptarlos. Las cosas nunca son fáciles porque siempre hay dificultades. Con ilusión y trabajo se pueden suplir otras carencias”, explicó. En cuanto al hecho de entrenar en Segunda B también fue preciso. “Ante todo soy entrenador. Yo disfruto entrenando, en el día a día, en el diseño de las tareas y en el campo. Esa es mi vida. La categoría no es tan importante. El mundo profesional te da más relevancia y más dinero, pero yo, por ejemplo, donde más he disfrutado ha sido en el filial de la Real Sociedad. Ahí me he sentido realizado. Un entrenador tiene que saber adaptarse”, advirtió.
Arconada conoce bien los valores. “Ser humilde es básico”, reiteró. “Desde la prepotencia poca gente ha llegado al éxito y ha conseguido grandes logros. Todos nos equivocamos y, cuando uno toma decisiones, el error siempre está presente. Hay que conseguir que haya más aciertos que errores y saber convivir con esos fallos”, precisó. Y en ese contexto agradeció al Real Jaén que pensara en él. “Agradezco la decisión del club de pensar en mí para formar parte de este proyecto, que nace con mucha ilusión y que es una de las cosas que ha hecho decantarme por venir a Jaén. Esa ilusión que he percibido y, sobre todo, esas ganas de crecer y hacer bien las cosas me han convencido”. Aludió en ese aspecto al debate interno que vivió para decirse entre el Burgos y el Real Jaén. “Me siento muy querido en Burgos y estoy muy agradecido. El corazón me pedía quedarme allí, pero, en la entrevista que tuve con Ramón, me transmitió tanta ilusión que me hizo recordar etapas mías anteriores en las que he disfrutado mucho como entrenador. Me veo en el Real Jaén con muchas posibilidades de trabajo. Aquí soy una persona más para colaborar en un proyecto mientras que en Burgos el proyecto era yo y eso es lo que no me terminaba de convencer”, dijo.
Ni la austeridad que proclama el Real Jaén ni la categoría quitan un ápice de ilusión a Arconada. “La vida son retos y tenemos que aceptarlos. Las cosas nunca son fáciles porque siempre hay dificultades. Con ilusión y trabajo se pueden suplir otras carencias”, explicó. En cuanto al hecho de entrenar en Segunda B también fue preciso. “Ante todo soy entrenador. Yo disfruto entrenando, en el día a día, en el diseño de las tareas y en el campo. Esa es mi vida. La categoría no es tan importante. El mundo profesional te da más relevancia y más dinero, pero yo, por ejemplo, donde más he disfrutado ha sido en el filial de la Real Sociedad. Ahí me he sentido realizado. Un entrenador tiene que saber adaptarse”, advirtió.
