Aquí el poeta

Un oscuro suceso, que más bien parece un lance partidista en la provincia de Alicante, ha dado con el legado documental de Miguel Hernández en Quesada, en nuestra provincia. Aquél poeta del relámpago que nos abrió el mundo a la sensibilidad de lo natural y nos iluminó de compromiso moral y estético, murió abandonado en prisión siendo muy joven, pero su poesía sigue siendo inmarchitable.

    22 ene 2014 / 17:11 H.

    En un afortunado peregrinar, el pueblo donde nació su esposa y amada Josefina Manresa, ha querido y ha sabido recoger el testimonio físico de su aliento poético. Y en Quesada, en Jaén, tendrá una sede permanente. Todo el mundo de la cultura y los ciudadanos que conocemos el sentido de la compensación humana, hemos de estar de enhorabuena. No soy nada provinciana, pero que un Ayuntamiento, Quesada y una Institución Provincial como la Diputación de Jaén hayan conseguido que Miguel Hernández se una para siempre a mi provincia, me hacen sentirme orgullosa de ser jiennense. El legado de Miguel Hernández va a abandonar su enclaustramiento en una cámara acorazada de un banco para ver la luz y abrirse a una tierra que lo quiere y a la que dedicó uno de sus poemas más enérgicos y reivindicativos: Andaluces de Jaén. Hoy todo el que ame la poesía  como una vía para la libertad y la reivindicación,  se sentirán también de Jaén.

    Ana Barberán
    Funcionaria