Ante el Corpus Christi
Concepción Agustino/Desde Jaén. El próximo día 10, celebraremos la solemnidad del Corpus Christi. En mis recuerdos permanece dicho día como uno de los más bonitos y significativos de mi niñez y juventud.
Guardo en mi mente imágenes que el tiempo no ha borrado: El blanco impoluto de los trajes de comunión, y las largas filas de niños que, vestidos así, formábamos parte de la procesión. Nuestro lento caminar, observando cuanto acontecía a nuestro alrededor. Los balcones, adornados de colgaduras y flores, los altares, las ramas que alfombraban el suelo, el gran número de personas que acompañaban el cortejo procesional. Como mecidos por las canciones a Jesús Sacramentado, aspirábamos el olor a incienso, rosas, claveles, gladiolos, etcétera, que ofrecía la tardía primavera. Una sensación de calma en el ambiente invitaba al recogimiento y a una íntima alegría. Recuerdo esas profundas miradas a la Custodia; al misterio de un Dios, alimento para el camino hacia la salvación. Así transcurría este día tan especial. Una explosión de luz y colorido, en que el Señor caminaba junto a nosotros, y el eco de su Palabra se hacía, una vez más, eternidad. Más información, en la edición impresa de Diario JAEN