Alberto Suárez pide paso

José Ramón Casado / Jaén
La victoria del Real Jaén ante el Granada en Copa Federación tuvo, entre sus protagonistas, a Alberto Suárez. El ariete asturiano, sin apenas oportunidades por las lesiones y la fiabilidad de la pareja titular Geni-Arriaga, demostró, con dos tantos, que Terrazas tiene recursos de garantías en el banquillo.

    14 feb 2009 / 09:54 H.

    Alberto Suárez se reivindicó en el Nuevo Estadio Los Cármenes con una actuación notable que afianzó el camino hacia semifinales del Real Jaén. En diez minutos, el ariete asturiano apagó la nimia esperanza del empate granadino con dos tantos de certera ejecución. En el primero, remató con sutileza un preciso envío de Álex García. Acto seguido, ganó la espalda a los centrales, controló un servicio interior y marcó a placer después de regatear al meta José Antonio. Dos tantos de diferente factura que reflejan los recursos de Alberto Suárez y que se ajustan al manual del delantero centro; dos goles que inyectan una dosis de ilusión a un futbolista marcado por el infortunio en la presente campaña. “Necesitaba una actuación como la del partido ante el Granada. Llevaba tiempo sin jugar y marcar goles es la mejor manera de demostrar al técnico que puede confiar en mí cuando sea necesario”, reconoce el asturiano, que apenas goza de protagonismo en su primera temporada en el club. La fiabilidad que ofrece la pareja formada por Geni y Arriaga, unida a una inoportuna lesión de pubis, han convertido en un muro insalvable el acceso a la titularidad del asturiano. Por si fuera poco, la llegada de Esparza en el mercado invernal, un jugador que actúa en la media punta y la delantera, complica aún más la situación de Alberto Suárez. El propio futbolista subraya la dificultad que supone no sólo figurar en la alineación titular, sino integrar una convocatoria. “La competencia es máxima y soy consciente de que está complicado jugar. Pese a todo, ojalá que los goles conseguidos el jueves me ayuden, al menos, a formar parte de la lista ante el Portuense”, señala. Y agrega: “Pese a todo, esperaba contar con más minutos esta temporada. Para un futbolista resulta difícil estar en el banquillo, pero trabajo duro en los entrenamientos a la espera de una oportunidad en Liga”. En la primera vuelta, Alberto Suárez  tuvo ocasión de demostrar su valía en contados encuentros. Su  mejor aportación se produjo en el partido de Melilla, donde rubricó el gol jiennense después de entrar en la segunda parte. Desde entonces y hasta el doblete del jueves frente al Granada, su hábitat natural se limitó, prácticamente, al banquillo y la enfermería. “Han sido meses complicados, pero confío en dar la vuelta a la situación en este segundo ciclo liguero”, avisa. En contraste con su situación individual, sobresale el brillante discurrir deportivo del equipo. Alberto Suárez no muestra sorpresa por la tercera plaza ni por el acceso a las semifinales de Copa. “La plantilla atesora calidad y está concienciada en lograr los objetivos marcados a principios de temporada”, destaca, al tiempo que aventura un futuro exitoso: “Estamos en el buen camino, pero hay que mantener el ritmo. El siguiente reto es ganar al Portuense”. Él, mientras tanto, seguirá a la espera de su oportunidad.