Al menos diez detenidos por nuevos disturbios en Setúbal, al sur de Lisboa
Al menos diez personas fueron detenidas por los disturbios ocurridos esta madrugada en un barrio de la ciudad de Setúbal, al sur de Lisboa, donde se quemaron varios vehículos y se escucharon disparos contra una comisaría de policía.
Las manifestaciones violentas comenzaron el jueves, cuando varios jóvenes del modesto barrio setubalense de Bela Vista se concentraron frente a la sede de la Policía de Seguridad Pública (PSP) para homenajear a un amigo muerto durante una persecución policial, tras un robo en un cajero automático.
Según informaron hoy medios estatales lusos, varios vehículos y contenedores de basura ardieron la pasada madrugada en la ciudad, lo que provocó el corte de una calle y la intervención de agentes de la PSP, que detuvieron a diez personas.
En el transcurso de la operación, las autoridades verificaron que varios de los arrestados eran "muy jóvenes" e informaron de la incautación de al menos un arma ilegal y un cóctel molotov.
"Quiero reafirmar a la población de Setúbal que no habrá condescendencia en estas situaciones. No puede haber condescendencia en estos casos", avisó la Gobernadora Civil de Setúbal, Eurídice Pereira, en declaraciones recogidas por la prensa lusa.
Esta mañana la situación ya era de aparente calma, según informaron varios medios locales.
Los conflictos de los últimos días han desatado las reacciones políticas en Portugal, donde formaciones tanto de la derecha como de la izquierda han criticado al Gobierno socialista luso.
Paulo Portas, líder del partido CDS-PP, la formación más a la derecha del arco parlamentario luso, pidió que el Ejecutivo que dirige José Sócrates actúe "sin rodeos" y calificó de "intolerable" la situación de inseguridad que se vive en Setúbal.
Por su parte, Jerónimo de Sousa, secretario general del Partido Comunista Portugués (PCP), consideró que no es un caso "policial" y sí un asunto consecuencia de un problema social "de fondo", derivado de la indiferencia del Gobierno.
Bela Vista, un barrio testigo de conflictos relacionados con la exclusión social y asociado durante años a la marginalidad y a la violencia, pertenece a Setúbal, una urbe de unos 120.000 habitantes situada a 50 kilómetros al sur de Lisboa