Al alcalde de Jaén

MARÍA CANTOS ALCÁZAR desde Jaén. Esta será la primera y última vez que María Cantos Alcázar, presidenta de la Asociación de Vecinos Torre del Concejo, del barrio de San Juan, emita un escrito con el único fin de defender su persona y honor. Sorprendente es el último comunicado emitido el día 28 de enero por el Ayuntamiento de Jaén (enviado a todos los medios y colgado en la página oficial de nuestro consistorio) en relación con la solicitud de rehabilitación integral de la calle Almendros

    31 ene 2013 / 18:20 H.

    Aguilar por parte de la asociación a la que actualmente represento, se puede leer como final del texto “no entendemos cómo alguna dirigente vecinal, que curiosamente trabajaba en las oficinas del tranvía, en su día no dijo ni pío cuando el PSOE dejó la obra a medio acabar y se gastó todo el dinero en no sabemos qué.” A mi entender necesita de unas obligadas aclaraciones.
    Primera.- Resulta a todas luces absurdo el hecho de atacar a una persona con la intención de hacerle daño recordando que durante un tiempo realizó unas tareas (en concreto la coordinación de la Oficina de Información sobre las Obras del Tranvía de Jaén) para desprestigiarla y desacreditarla. Me siento profundamente orgullosa de haber participado en el mayor proyecto que jamás ha visto la ciudad de Jaén. No me avergüenzo, como abogada que soy, de haber intentado solucionar las reclamaciones de aquellos vecinos que en mayor o menor medida se vieron afectados por las obras; me siento orgullosa de haber intentado causar el menor perjuicio posible a los comerciantes de la zona mediante la petición y colocación de rampas de acceso a sus comercios, mediante señalizaciones publicitarias en lugares visibles, mediante limpiezas programadas de escaparates, mediante peticiones personalizadas de cargas y descargas, etcétera. No me avergüenzo de haber sido el nexo de unión entre los vecinos y la obra; es más, durante esa época aprendí lo importante que es que el ciudadano tenga un contacto directo al que acudir cuando necesita resolver alguna cuestión sobre la obra que tiene a sus pies. Pero solo se menciona ese periodo de mi vida laboral con una intención torticera, tengo ya cierta edad y, aseguro, que he hecho, y estoy haciendo, más cosas en mi vida. Segunda.- Manipuladora y falsa es la información que asegura que mi persona “no dijo ni pío en su momento”, pero al mismo tiempo tan fácil de comprobar que con el solo hecho de “tirar de hemerotecas” se comprueba. Me canso yo misma el ver mi nombre continuamente unido a “María Cantos reivindica el arreglo de Almendros Aguilar, María Cantos exige la terminación de la calle Martínez Molina, María Cantos recoge firmas para pedir la terminación de obras, María Cantos da un ultimátum al Ayuntamiento para que continúe con las obras, María Cantos convoca una manifestación en protesta por la situación de las calles de su barrio. Y, casualmente, todas estas actuaciones, todos estos titulares, se dieron estando Carmen Peñalver, como alcaldesa, y Manuel López, como concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Jaén. Es decir, actuaciones de esta presidenta contra el PSOE. Tercera.- Aclarado el anterior punto vamos a lo verdaderamente grave: este Ayuntamiento no acepta al movimiento vecinal. Hoy me ha tocado a mí, mañana le puede tocar a otro compañero de alguna asociación que reivindique algo para su barrio. No comprende que, por mucho que se ataque a mi persona, el problema sigue ahí, que los vecinos de mi barrio siguen estando indignados porque tienen las calles en un estado lamentable, porque siguen con un servicio de abastecimiento de agua obsoleto, porque escasea el alumbrado público, porque el mantenimiento urbano brilla por su ausencia, porque los proyectos nunca llegan a inaugurarse, porque se sienten abandonados. Y eso, estando yo, María Cantos, de presidenta, o “Perico el de los Palotes”. Reitero que es la primera y última vez que no hablo representando a mi Asociación, sino a mí misma; y por ende, lo único que pido es que, cuando se hable de mí, que se haga por lo que represento, por las demandas que transmito de mis vecinos, de mi barrio, no por cuestiones personales que entran dentro del ámbito privado de cualquier persona. Yo jamás lo haría. Y si alguien piensa que las demandas que transmito no son ciertas, que me las invento yo para conseguir algo, que pasee un rato por esta zona, si es que puede, o quiere.