Aguas fecales inundan una vivienda de la calle Carnero

Gema Siles Colmenero, residente en el número 9 de la calle Carnero, no olvidará la reciente fiesta de Todos los santos. Concretamente la madrugada del 2 de noviembre, salió a cenar fuera. Al regresar, nada más abrir la puerta de su casa, olió una peste tremenda: la planta baja estaba inundada de aguas fecales. El salón, el cuarto de baño y la cocina. “Los líquidos venían del mollejón del patio”, dice.
Siles y su esposo, Hubert García, llamaron al Servicio de Emergencias del 112 y a la empresa municipal Aqualia. Un fontanero levantó las trampillas de la calle, según cuenta la mujer a este periódico. El profesional  señaló que el problema no estaba fuera. “Me quedé con la casa llena de suciedad. Nos fuimos a dormir a las seis de la madrugada. Ya no llovía”, relata la jiennense.

08 nov 2015 / 09:40 H.


La lluvia regresó horas después, sobre las doce del mediodía. Los residentes repitieron la operación: cubetas para evitar que la inundación fuese a más. “Entonces llamamos a Aqualia y a una empresa privada. Como es de Úbeda, llegó a las dos de la tarde”, prosigue. Ya en la calle Carnero, tanto Aqualia como el camión coincidieron en el que el origen del atranque estaba fuera del piso, en la calzada, competencia de la empresa municipal. “Me dijeron que hacía falta una cámara y que no podían traerla hasta el siguiente día. Les pedí una bomba extractora para evitar que el agua entrase en mi domicilio pero, por cuestiones de altura, no pudieron cederla”, narra la jiennense. Al día siguiente, martes, la avería fue subsanada gracias a los trabajos de Aqualia. No obstante, Siles registró un escrito en el Ayuntamiento en aras de un objetivo: cambiar la red de canalización en la calle, perteneciente al casco antiguo. “Queremos una solución estable, porque es muy posible que vuelva a suceder. De hecho, en el edificio que linda con mi vivienda ya hubo inundaciones el año pasado”, lamenta. “Desde el Ayuntamiento me han dicho que tienen un proyecto para cambiar la red de abastecimientos de aguas fecales, pero que no pueden ejecutarlo”, agrega. Siles asegura que el barrio está indignado por la situación.