Adiós al sueño de la Copa
El Linares se despidió de la Copa del Rey después de perder en Las Gaunas ante un UD Logroñés, que se mostró superior y que siempre fue por delante en casi todo: marcador, juego, intensidad e iniciativa.

Pese a ello, el conjunto linarense buscó las tablas en los minutos finales gracias a varias faltas, aunque sin consecuencias ni problemas para un meta Fermín que tuvo poco trabajo. Después de unos minutos con mucho respeto, presión sobre el rival de ambos conjuntos y poco juego combinativo, el UD Logroñés fue imponiendo su dominio con varias llegadas por los costados, donde Joel Valencia y Álvaro González percutían como extremos y eran ayudados por sus laterales Edu Payá y Reguilón, lo que complicaba a un Linares que no entendía lo que estaba pasando. Para intentar contrarrestar, los visitantes intentaron pausar el ritmo, pero el tanto de falta directa de Muneta a los 19 minutos no contribuyó a que los blanquirrojos decrecieran su intensidad. Al contrario, siguieron insistiendo para buscar la sentencia rápida, pero el tiro cruzado de Álvaro González se marchó fuera.
El Linares necesitaba respirar y lo hizo cuando Juanfran, desde la frontal, probó a Fermín con un tiro seco y ajustado al palo que el guardameta desvió a córner. Podía ser un rayo de esperanza para los de Torres que, sin embargo, no terminaban de encontrar su sitio en Las Gaunas. Dio la impresión de que habían neutralizado el ímpetu de los riojanos, pero estos hacían todo lo posible por acabar jugadas aunque sus lanzamientos fueron lejanos. El paso de los minutos provocó que hubiera más imprecisiones y que el conjunto linarense saliera de su campo con más asiduidad, aunque sin profundidad. El descanso debía servir para refrescar ideas después de que un par de entradas que enervó el choque. En este sentido, el más beneficiado fue el Linares que se topó en la última acción de la primera mitad con el miedo en el cuerpo cuando Reguilón enviaba la pelota al poste tras una acción ensayada. Torres buscó variantes, ya movió de sitio a sus jugadores durante la primera parte, y a la hora de encuentro ya había realizado las tres sustituciones: Corpas, Gámiz y Ferrón por Javi Quesada, Rodri y Kike. Movimientos que no trajeron consecuencias significativas en el devenir del juego, ya que a los visitantes, aunque ahora parecían dominar más la posesión, no encontraban la forma de poner nerviosa a una defensa local segura. Es más, Muneta, en una falta lateral, ejerció de asistente para que Birane Ba, con un gran remate de cabeza, pusiera tierra de por medio. El Linares bajó los brazos y la UDL trató de sentenciar: tiro de Muneta y de Carlos Fernández. Todo estaba casi decidido hasta que Corpas, en una de las pocas llegadas visitantes, centro para que Ferrón superara a Fermín. Un gol que animó a los linarenses hasta que Corpas vio dos amarillas. Ahí se terminó el sueño de empatar el partido.