Acusada de asesinato la mujer que apuñaló a una anciana en Arjona
Rafael Abolafia/Jaén
Dolores P. G. se ha enterado en la cárcel de que está acusada de asesinato. Cuando ingresó en prisión, a finales del pasado mes de julio, la anciana de Arjona a la que apuñaló aún estaba viva. La mujer, que tenía 82 años, falleció el 26 de diciembre, como consecuencia del 'deterioro físico' ocasionado por las heridas de arma blanca.
Rafael Abolafia/JaénDolores P. G. se ha enterado en la cárcel de que está acusada de asesinato. Cuando ingresó en prisión, a finales del pasado mes de julio, la anciana de Arjona a la que apuñaló aún estaba viva. La mujer, que tenía 82 años, falleció el 26 de diciembre, como consecuencia del 'deterioro físico' ocasionado por las heridas de arma blanca.
Los hechos se remontan a la tarde del 30 de julio, cuando Dolores P. G., una vecina de Arjona que entonces tan solo tenía 20 años, se abalanzó sobre una vecina, que tomaba el fresco en la puerta de su casa, en la calle Conde Antillón. No hubo motivo aparente para una agresión que se produjo “sin mediar palabra”. La anciana, M. R. I., recibió dos navajazos en el abdomen. La presunta autora de los hechos huyó en su coche y sufrió un grave accidente. Un testigo se ofreció a auxiliarla, pero ella lo rechazó para, poco después, darse a la fuga. La Guardia Civil puso en marcha un importante dispositivo de búsqueda. Los agentes encontraron a Dolores tres horas después.
Mientras tanto, la víctima, fue operada de urgencias y permaneció durante varios días en el Hospital Alto Guadalquivir de Andújar. Finalmente, fue dada de alta y volvió a su casa. No obstante, su estado de salud fue empeorando de forma progresiva. Ingresó en varias ocasiones más y, finalmente, falleció el 26 de diciembre pasado. Los forenses determinaron que la muerte se debió a un “deterioro” como consecuencia del apuñalamiento. Así que el Juzgado que llevaba el caso acusó a Dolores P. G., la autora confesa de la agresión, de un delito de asesinato.
La joven, que acaba de cumplir 21 años, permaneció varios días ingresada en un centro hospitalario por orden de su señoría. Sufre trastornos mentales. Con anterioridad a los hechos, había estado en manos de psicólogos por sus problemas de salud. Después de apuñalar a la anciana, volvió ser tratada. Una vez estabilizada, ingresó en prisión. Primero, en Albolote y, posteriormente, en Jaén, donde permanece en la actualidad mientras espera juicio. Y es que los forenses han determinado que es imputable, es decir, que está en condiciones de responder ante un tribunal por el crimen.
No obstante, su defensa tratará de demostrar que tiene sus facultades mentales afectadas. Por ello, ha solicitado al juzgado que forenses hagan un informe sobre su estado de salud.