Acuerdo para reconstruir la red de irrigación en Afganistán
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha firmado un acuerdo de 27,7 millones de dólares con el Ministerio de Energía y Agua de Afganistán para apoyar la rehabilitación de los sistemas de irrigación de ese país, según ha infomado la agencia de la ONU.
La organización ha ofrecido asistencia técnica así como conocimientos especializados y capacitación para llevar a cabo el Proyecto de reconstrucción y desarrollo de los sistemas de irrigación (IRDP).El objetivo general del proyecto es aumentar la productividad agrícola en Afganistán, que va en consonancia con la estrategia de desarrollo de ese país. Se prevé que la reconstrucción de los sistemas de irrigación en el país abarque una superficie total de regadío de aproximadamente 300.000 hectáreas, incremente la superficie irrigada en un 15%, propicie un aumento del rendimiento de las cosechas de un 20% y beneficie a unos 230.000 hogares, según la FAO. La guerra en Afganistán y la emigración de la población rural han contribuido a la degradación y el abandono del sistema de irrigación del país que se ha deteriorado en las últimas tres décadas. "En las zonas rurales, los agricultores no lograban obtener suficiente agua para cultivar sus tierras. El resultado ha sido la disminución de la producción agrícola", ha explicado el Jefe de la Unidad de Fomento y Gestión de las Aguas de la FAO, Pasquale Steduto. El trigo es uno de los cultivos más importantes de Afganistán. En un 80% de las tierras que cultivan los agricultores se produce trigo. "Cualquier reducción en la producción de trigo se traduce en escasez de alimentos y repercute directamente en la seguridad alimentaria de Afganistán", ha subrayado Steduto. Entre 2004 y 2011 la FAO ayudó a Afganistán a aumentar la productividad de sus cultivos y la superficie irrigada. Con su ayuda se han rehabilitado unas 778.000 hectáreas, introduciendo la irrigación en 158.000 héctáres de superficie.