ACTUACIONES.- Música y ritmos que alegran las celebraciones

Inmaculada Espinilla
La música es vida. Siempre ha acompañado al hombre en su devenir a través de los siglos. La hay para bailar, para llorar y para amar. Cómo no, también para festejar. Los Jiennenses del Año reconocen la trayectoria de personas e instituciones que hacen grande su tierra. Y, como en cualquier celebración que se precie, la música es un ingrediente fundamental, al igual que los brindis y la alegría.

    21 abr 2013 / 09:18 H.

    Por eso, melodías de muy diversa índole han puesto el broche final en la Gala de los Jiennenses del Año en numerosas ediciones. Por su escenario han pasado artistas de todo nivel y condición. Para algunos de ellos supuso una lanzadera en su carrera, para otros su debut profesional y también están los que ya despuntaban y estaban en lo más alto, pero, aun así, quisieron acompañar no solo a Diario JAEN, sino a toda la sociedad y a los premiados. Les une su deseo de apoyar a los que trabajan por su tierra y, cómo no, mostrar su arte sobre las tablas, ya sea en un teatro, en la Universidad o en unas instalaciones al aire libre.
    Son muchos los artistas que dejaron huella en la Gala de los Jiennenses del Año.  Uno de los primeros fue el bailarín Antonio Jaén, que actuó con buena parte de sus alumnos en la edición de 1988. Durante más de una hora repartió gracia y talento a golpe de taconeo. Los estudiantes de su academia, y futuros bailaores, se unieron a la fiesta para demostrar su valía.
    Para el guitarrista José Rojo —actuó en los Jiennenses del Año 1991— supuso su debut como guitarrista. “Tenía diecisiete años y estudiaba COU. Recuerdo que fue en el Juleca, y disfruté muchísimo”. Después de ese concierto estudió la carrera de Derecho, pero supo que su vida estaría pegada a las seis cuerdas de su instrumento. Por eso, se matriculó en el Conservatorio de Córdoba y cursó la especialidad de Flamenco. “Ahora me dedico de lleno a la música. Soy profesor del Conservatorio Profesional y estoy inmerso en la terminación de un disco. Espero que esté listo a final del verano”, comenta.
    Si José Rojo llevó la seriedad flamenca a los Jiennenses del Año, la actuación más atrevida llegó de la mano de las Miami Sound Machine (Jiennenses 2002). En un escenario académico, el trío compuesto por Carla Ramírez, Lorena Pinot y Sohanny Gross logró soliviantar al público por completo y romper la seriedad del momento. Sorprendieron y maravillaron a los asistentes con sus movimientos sensuales y sus ritmos latinos. Habían vendido más de setenta mil discos de su primer trabajo, “MSM”, y su actuación fue una auténtica revelación.
    A las chicas de Miami Sound Machine les siguieron la guitarra  y la voz sosegada de Vega —Gala de los Jiennenses del Año 2003, celebrada en el aula magna de la Universidad—. Se dio a conocer en la segunda edición de “OT”, y cuando apareció en la ceremonia de JAEN ya había vendido doscientas mil copias de “Quiero ser tú”. Su carrera musical no se ha difuminado con el paso de los años. La cantautora ha editado cinco discos en solitario, además de otras colaboraciones. Es conocida en los dos lados del “charco” y, entre otros reconocimientos, ha estado nominada en los Grammy latinos. Es una de las artistas que tiene el orgullo de cantar sus propias canciones.
    Merche fue la invitada en la Gala Jiennenses del Año 2004, celebrada, una vez más, en la Universidad. La intérprete gaditana encandiló a los presentes por su torrente de voz y profesionalidad sobre las tablas. Interpretó cinco  temas, y el año pasado lanzó su último disco —el sexto en su trayectoria—, “Un mundo de colores”, con el que ha alcanzado su madurez profesional.
    En la Gala Jiennenses del Año 2005 la música dejó paso al humor del jiennense David Navarro, que, también, se metió en el bolsillo al público con unos monólogos que retratan a la perfección el sentir y la esencia de Jaén. Esta actuación fue un oasis dentro del mundo musical que rodea la gran noche de Diario JAEN. De esta manera, en los Jiennenses del Año 2006 Alma Mesa, que actuó acompañada del guitarrista Alberto Pérez, se dejó el corazón en el teatro Maestro Álvarez Alonso de Martos. El dúo, con el nombre Costa del Soul, mostró su satisfacción por colaborar en la ceremonia. “Estamos encantados de formar parte de esta gala, que es, para nosotros, especial y mágica”, afirmó en ese momento.
    María Villalón —Jiennenses del Año 2007, en el Nuevo Teatro Infanta Leonor—, actuó recién salida del programa televisivo “Factor X” y después de sacar su primer disco. “Fue uno de mis primeros conciertos. Lo recuerdo con mucho cariño, porque vino mucha familia y eso siempre es especial. Por otro lado, los teatros tienen una magia diferente”, comenta. En la actualidad sigue “en la lucha”. Prepara su gira veraniega, en la que interpretará, entre otros, las canciones de “Historias de una cantante”. Reconoce que hoy en día es complicado “ganarse la vida con la música”, pero está satisfecha de poder cantar.
    Y es que la celebración de los Jiennenses del Año ha sido un escaparate para las diferentes expresiones musicales. Buena prueba de ello fue la actuación del Cuarteto Viena —en la edición de 2008—. El grupo, fundado en el año 2002, se convirtió en el mejor representante del género clásico.
    El flamenco volvió a la gala en los Jiennenses del Año 2009, con la actuación de la cantaora Gema Jiménez —acompañada con la guitarra de Eduardo Rebollar—, una galduriense que ha llegado a lo más alto en el arte jondo. “Fue una experiencia muy bonita cantar en mi tierra”, señala. En ese momento la joven estudiaba en el Conservatorio el Grado Medio de Flamenco (ahora cursa Flamencología, además de repartir su talento). Empezó a cantar joven y se presentó a varios concursos. Después de ganar el de La Unión (Murcia) decidió que era el último certamen en el que competía. Ese año compartió escenario con el Payo Juan Manuel y la Tuna de Peritos. De hecho, la cantaora recuerda como uno de los momentos más especiales cuando cantó con la estudiantina “Andaluces de Jaén”.
    La lírica aterrizó en la Gala de la mano de la reputada soprano granadina Mariola Cantarero —Jiennenses del Año 2010—, que deleitó a todos con su voz y su elegancia sobre el escenario. Y ya en la última edición de los Premios Jiennenses actuó Flamencubeando, una formación que mezcla el bolero, el tango y el son con aires flamencos. “Para nosotros fue nuestra presentación ‘oficial’ y tuvimos la suerte de que fuese un público tan selecto. Todo salió a pedir de boca. Fue una palanca de lanzamiento poder tocar ante mil personas”, asegura su director musical, Luis Francisco Delgado, que anuncia que uno de sus proyectos es un disco.
    Sí, los Jiennenses del Año son un reconocimiento a la sociedad pero, también, una paleta llena de melodías y ritmos.

    La música tradicional irlandesa "tomará" la próxima Gala

    Pandora surgió del viaje realizado a Irlanda por Carlos Jiménez y Yeshica Ruiz. A finales de 2010  decidieron sumergirse en la tradición de ese país y beber de sus melodías. Una guitarra y un violín  hicieron nacer Pandora, comenzaron a tocar en locales pequeños y, pronto, se dieron cuenta de que necesitaban incluir más instrumentos para dotar a cada canción de una fuerza superior. Así, se incorporaron la percusión, el bajo —Ruiz— y la batería. El próximo 3 de mayo de 2013, en el Complejo Juleca, pondrán la música en la Gala de los Jiennenses del Año 2012. Aviso a navegantes: la diversión, las sonrisas y la calidad están aseguradas. Y la alegría, factor determinante de este grupo en un escenario. No se lo pierdan.