A Sánchez Gordillo
Desde Jaén. “Atravesando “Lagártica”, es decir, nuestra querida “Jaén ni pollas”, se encuentra la otra “marcha verde”, encabezada por Sánchez Gordillo, que no finalizará en Marruecos como pasó con el caudillo, sino que terminará en la capital de esta magnífica y malograda tierra de virreyes sin corona; incapaces de apostar por una mísera envasadora, siendo dueños y señores de la mayor producción mundial de aceite de oliva, el oro verde de sus entrañas.
Es más que triste, tristísimo, observar cómo una enorme serpiente compuesta por humanos ondula sin veneno nuestras carreteras comarcales, para exigir la ocurrencia de un mitinero que no transita por otros derroteros mucho más eficaces en la lucha contra el paro, sólo para encontrar un efímero protagonismo que lo llevará directo al olvido por no hacer bien sus deberes. Y sí, digo deberes, porque en su manual de bolsillo debe constar que por lo que realmente se ha de luchar es por la creación de puestos de trabajo, que es precisamente lo que acabaría con la lacra administrativamente de unas limosnas que no curan el cáncer. Jusfiticar la marcha obrera bajo el epígrafe de que concedan las limosnas, no es más que una estratagema de mal gusto para calentar motores en un barco hundido de antemano. Si verdaderamente el comandante en jefe pretende luchar por esta cacequil telúrica, tendrá que cambiar de estrategia, para conseguir de esta provincia, con el mayor índice de paro de toda España, la más próspera y enérgica de todas, pues cuenta con una producción que se adjudican los italianos.
Manuel Poisón Almagro