A juicio por el secuestro de dos personas para desvalijarlas

La Audiencia acoge hoy el juicio contra cuatro jóvenes, vecinos de la capital, acusados de perpetrar dos secuestros exprés en menos de mes y medio. Los procesados están dispuestos a reconocer su culpa y aceptarán condenas que oscilan entre los trece y los seis años y medio de prisión.

    20 dic 2011 / 10:20 H.

    Si no hay cambios de última hora, Jesús C. G., Miguel J. N. y Wellington Paul V. A. ratificarán hoy ante sus señorías de la Sección Tercera el acuerdo de conformidad que sus abogados han alcanzado con la Fiscalía. Los tres se declararán autores de los dos secuestros exprés perpetrados entre el 2 de diciembre de 2010 y el 20 de enero de 2011. Serán condenados por delitos de detención ilegal, robo con violencia y lesiones a penas que oscilan entre los trece y los seis años y medio de prisión. En principio, la Fiscalía pedía condenas que oscilaban entre los 9 y los 18 años de cárcel.
    La primera acción se produjo en la madrugada del 2 de diciembre de 2010. Tres hombres, Jesús C. G. Miguel J. T. y Wellington Paul V. A., abordaron a una mujer que se disponía a guardar el coche en su garaje. La aguardaron escondidos en el aparcamiento y, con amenazas, lograron introducirla por la fuerza en el maletero de su propio vehículo. Le arrebataron la documentación y se marcharon en busca de un cajero automático para desvalijar la cuenta bancaria. Sacaron 600 euros de una sucursal de Torredonjimeno. Ya con el dinero, volvieron a la capital y dejaron a la mujer en las inmediaciones de la Avenida de Muñoz Grandes.
    La víctima acudió a la Comisaría y la Policía investigó lo sucedido. Sus indagaciones no dieron resultados. Sin embargo, en la noche del 20 de enero se produjo un episodio “casi idéntico”. La única diferencia es que los asaltantes utilizaron mucha más ferocidad. En esta ocasión, presuntamente, participaron Miguel J. N. y Jesús C. G. La víctima, un varón, fue asaltado en el aparcamiento de su casa, cuando se disponía a guardar el coche. Lo abordaron por la espalda dos jóvenes, con los rostros tapadOs. El hombre se resistió. Como respuesta, recibió una paliza. Lo metieron en el maletero de su propio vehículo e, incluso, llegaron a atarle una soga al cuello para demostrarle que iban en serio. De un cajero automático sacaron 540 euros. Además, se quedaron con 300 euros que el hombre tenía en efectivo, así como dos ordenadores portátiles.
    Esta vez, los asaltantes cometieron un error, lo que permitió a los investigadores seguir su rastro. Hubo cinco detenidos, pues un hermano de Jesús C. G. utilizó parte de los objetos robados. Está acusado de receptación. El juicio se celebra hoy en la Audiencia. Rafael Abolafia/Jaén