El galo Terry es la primera víctima del Dakar en tierras de Suramérica
Redacción / Buenos Aires
El motociclista francés Pascal Terry, de 49 años, fue hallado muerto en la madrugada de ayer en el trayecto donde se disputó la segunda etapa del rally Dakar, según informaron fuentes de la organización. Terry se hallaba desaparecido desde el domingo, cuando comenzó su búsqueda. Los restos de Terry, que participaba por primera vez en el Dakar, fueron hallados por unos socorristas en el kilómetro 197 del tramo entre las ciudades argentinas de Santa Rosa y Puerto Madryn, segunda etapa de la competición que por primera vez se disputa en Suramérica, con un recorrido de más de 9.000 kilómetros entre Argentina y Chile.
El motociclista francés Pascal Terry, de 49 años, fue hallado muerto en la madrugada de ayer en el trayecto donde se disputó la segunda etapa del rally Dakar, según informaron fuentes de la organización. Terry se hallaba desaparecido desde el domingo, cuando comenzó su búsqueda. Los restos de Terry, que participaba por primera vez en el Dakar, fueron hallados por unos socorristas en el kilómetro 197 del tramo entre las ciudades argentinas de Santa Rosa y Puerto Madryn, segunda etapa de la competición que por primera vez se disputa en Suramérica, con un recorrido de más de 9.000 kilómetros entre Argentina y Chile.
El cuerpo de Terry fue encontrado a alrededor de las 2.00 de la madrugada entre unos pastizales. “El piloto estaba en un lugar de muy difícil acceso en medio de una vegetación muy densa, a 15 metros de su moto. Se había sacado el casco y se refugió a la sombra, disponiendo de comida y alimentos encontrados cerca de él”, señalaron los organizadores.
El cadáver será sometido a una autopsia para determinar la causa del fallecimiento. El piloto francés formaba parte del equipo Yamaha junto a su compatriota Pascal Gibert. Fuentes de la organización del Dakar informaron de que Terry había avisado que tenía problemas de combustible en su moto, según un mensaje que mandó por el GPS que llevan todos los competidores cerca de las 17.00 horas locales del domingo. Pudo reanudar la marcha al conseguir que otro participante en el raid le diera combustible, pero más tarde su sistema de comunicación dejó de funcionar.
Una hora después de ese aviso, a falta de una respuesta de Terry a un mensaje de los organizadores, se dio una alerta para la búsqueda del piloto, en la que intervinieron socorristas y agentes de las fuerzas de seguridad.
El director de la prueba, Etienne Lavigne, lamentó el suceso y dio las primeras explicaciones. “La muerte de Pascal ha ocurrido hace días. Hubo un problema con el sistema de comunicación los días 4 y 5 de enero. La información de la baliza satelital llegó a París el 4 y nosotros la recibimos el 5”, admitió.
De hecho, la Policía de La Pampa reconoció que buscaba al piloto desde la noche del martes, cuando recibieron el aviso, pese a que desapareció el domingo.
ya van 54 víctimas. Terry, debutante en el Rally Dakar,se une así a la larga lista de fallecidos durante la disputa de esta prueba, considerada una de las más duras del mundo. Ya son 54 las personas que han perdido la vida desde que empezó esta competición. La primera muerte ocurrió en 1979 y la víctima fue el motociclista Patrick Dodin, que se salió de la pista en Agadés (Níger). En la última edición, en 2007, el motociclista surafricano Elmer Symonds, de 29 años, falleció en el acto al chocar contra el borde de un río seco en la etapa entre Er Rachidia y Ouarzazate (Marruecos) y el piloto francés Eric Aubijoux, de 42 años, murió de un paro cardiaco entre las ciudades senegalesas de Tambacunda y Dakar. Los años más luctuosos de la carrera de aventuras fueron 1986, edición en la que murieron siete personas, entre ellas el fundador de la prueba, Thierry Sabine, y 1988, en el que fallecieron seis. En 2005, el motociclista italiano Fabrizio Meoni, vencedor en las ediciones de 2001 y 2002, muere de un paro cardíaco en plena etapa en Mauritania. Entre los muertos hay dos españoles: Tomás Urpí, que seguía algunas etapas de la prueba en 1996, y el piloto José Manuel Pérez, El Carni, en un accidente en 2005. La pasada edición 2008 del rally Lisboa-Dakar fue suspendida por falta de seguridad en las etapas que debían celebrarse en Mauritania, después de las amenazas terroristas del grupo terrorista Al-Qaeda.