1-0 Robben encabeza el retorno blanco a la zona de Champions

Dicen que a año nuevo, vida nueva. Y el Bernabéu, aparte de estrenar césped —traído en piezas desde el Alentejo portugués—, recibió, en partido oficial, a sus últimas dos incorporaciones, el holandés Klaas-Jan Huntelaar, que procede del Ajax, y el francés Lassana Diarra, del Portsmouth inglés, que, para no ser considerado el segundo Diarra, a pesar de usar también el seis, juega como Lass. En el Villarreal, el chileno Manuel Pellegrini situó en punta, junto con el italiano Giuseppe Scurto, “Rossi” a Nihat, en detrimento de Joseba Llorente, que saldría tras el descanso sustituyendo al turco, mientras que en el Madrid más holandés de la historia, fue su mejor hombre, Robben, el primero en avisar con un tiro que Gonzalo alcanzó a desviar lo justo para que tocase el larguero antes de salir a córner, en el doce. Dos minutos antes de que su compatriota Sneijder repitiese ocasión, de otro fuerte disparo de lejos. Y para seguir con la versión naranja del merengue fue Huntelaar el primero en ver una amarilla, en un partido que no despertó hasta el gran gol de Robben, pasada la media hora, de un zurdazo que entró casi por la escuadra derecha del arco defendido por Diego López. Después de esta jugada, y a pesar de que los amarillos intentaban controlar el centro del campo merced a las acciones del asturiano Santi Cazorla, del hispano-brasileño Marcos Senna y del a ratos magistral Pires, el Madrid pudo ampliar su ventaja dos veces poco antes del descanso. En el cuarenta, Sergio Ramos le colocó un balón de oro a Huntelaar que el debutante controló bien, pero no consiguió materializar ante el portero, cuyo despeje desaprovechó Raúl, que tuvo mala suerte instantes después al resbalarse cuando estaba a punto de recibir otro buen servicio de Sneijder.   Cazorla lo intentó desde lejos en el quinto de la reanudación, pero fue el recién ingresado Llorente el que estuvo a punto de lograr, dos después, un empate que evitó, de nuevo, Casillas. El “submarino” buscaba golpear la línea de flotación local, pero el luso Pepe destacó en la teórica zaga de lujo blanca, que integró con Ramos Cannavaro y Heinze. Aparte de un nuevo intento de Cazorla y los últimos e ineficaces cabezazos de Llorente y del uruguayo Sebastián Eguren, los mediterráneos no completaron una combinación efectiva. Se alejan de los puestos a los que aspiran y el Real Madrid, por contra, recuperó su puesto en la zona de Liga de Campeones.