La vuelta de las serenatas

Valdepeñas recupera la tradición de cantar con la tuna en las prebodas

26 sep 2016 / 17:30 H.

En Valdepeñas de Jaén, e los años 80, existía la tradición de que los enamorados ofrecían “serenatas” a sus novias o pretendientes. Un grupo musical con instrumentos, unas veces de cuerda y otras de viento, acompañaban al novio y bien entrada la noche, en la puerta de la casa de su amada interpretaba bonitas melodías, lo cual significaba la demostración de su amor hacia ella.

Pues bien, tras perderse la costumbre durante un tiempo, volvió a recuperarse gracias a José, de Jamilena, que quiso demostrar su amor, públicamente, a su novia, Ana Belén, en Valdepeñas de Jaén. Así que el jiennense, acompañado de un grupo de jóvenes componentes de la Tuna Universitaria de Jaén, entre los cuales estaba el hermano de la novia Manolo, se trasladó al municipio de la Sierra Sur. Allí, ya de noche y a las puertas del domicilio familiar de Ana Belén, comenzaron a interpretar una bonita canciones para sorpresa de la joven, sus padres, familiares y vecinos, que se sorprendieron con tan agradable sonido. El novio, cuando apareció Ana Belén a las puertas de la casa, le entregó un bonito ramo de flores y ella le correspondió con un beso y un fuerte abrazo. La pareja bailó en el centro de la calle y tomó un aperitivo junto a familiares y amigos, hasta altas horas de la noche. La celebración llegó una semana antes de su enlace matrimonial, que lo tienen programado para el sábado día 1 de octubre, en la parroquia de Santiago Apóstol de Valdepeñas, y el almuerzo en el Hotel HO Ciudad de Jaén. Una “preboda” que se convirtió en una bonita demostración de amor y una recuperación de tradiciones.