“Nunca pensé que podría hacer teatro hasta que me animé y me encantó”

29 sep 2019 / 11:18 H.

“Ha sido totalmente repentino y una gran sorpresa. Eso sí, estoy muy contento, la verdad”. Con estas palabras resumía Eulogio Vico Esquinas la emoción de recibir el Premio Teatro de esta edición de Jaén Joven. Un reconocimiento que le ha llegado “sin esperarlo”, pero que lo acepta “con mucha alegría y emoción”.

A sus 24 años, Vico es una persona que combina aficiones que, “a priori”, no tienen nada que ver. Sabe dar espectáculo sobre el césped, como delantero en el Atlético Porcuna, y sobre el escenario, como miembro del grupo de teatro La Criba de Peal de Becerro, su pueblo natal. “El fútbol me apasiona de toda la vida”, comenta. Empezó como benjamín y formó parte del Martos CD y el Atlético Mancha Real, hasta terminar en el equipo porcunense. El teatro vino después, pero lo cogió con la misma emoción. Al ser preguntado por cómo se compaginan ambas aficiones, declara que “llevándolo todo hacia adelante, con mucha alegría e ilusión”. Ese es el truco y lo que le ha llevado a conseguir el reconocimiento jiennense.

Estar en un equipo de Tercera División significa mucho para Vico, es más que un “hobby” en el que el equipo “lo es todo”. “Vamos todos a una, peleando todos juntos para cumplir los objetivos que nos proponemos”, asegura el delantero del Porcuna, y añade: “Nosotros vamos sabiendo lo que tenemos que hacer, partido a partido”.

El teatro es “otro cantar”, pero también su fuente de pasión e inspiración. Lleva varios años subiéndose a los escenarios, con todo tipo de papeles, “según diga el director”. “Nunca pensé que podría hacerlo, ni me lo planteé, hasta que me vi ahí arriba y me encantó”, explica. En este tiempo se ha metido bajo la piel de diversos personajes. Drama o comedia, más moderno o más clásico, desde “Bernarda Alba” a “Lisístrata” o “Historia de una escalera”. “Estoy abierto a cualquier oportunidad”, afirma. Lo que le enganchó del teatro fue “el compañerismo”, la reunión de gente “de siempre” para subir al escenario y dar vida a un libreto, con voces de todo tipo de personajes que resuenen en el teatro. “Es una gran experiencia que se vuelve adictiva”, concluyen