“La unión de los vecinos, sin que las ideologías interfieran, es vital para que estemos cerca de hacer real la mejora que reivindicamos”

PREMIO Torreblascopedro

10 jul 2016 / 11:45 H.

La unión hace la fuerza. Además del lema nacional de Bélgica, esta máxima es la que guía el proceder de unos vecinos en una lucha justa. La Plataforma Ciudadana por un Puente Digno está a punto de hacer realidad el anhelo de más de seis mil personas distribuidas en los municipios de Torreblascopedro, Mancha Real y Villatorres —Villargordo, Vados de Torralba y Torrequebradilla—. Con educación, pero una actitud reivindicativa, el colectivo, gestado en el núcleo de Campillo del Río, perteneciente al término torreño, acaricia con los dedos una estructura que mejorará las comunicaciones de la aldea y evitará dar un rodeo de cincuenta kilómetros cada vez que “caen cuatro gotas”.

La plataforma cuajó a finales del pasado verano, después de un intento que no llegó a fructificar. Con apoyo de los ayuntamientos de Torreblascopedro y Villatorres, en septiembre de 2015 empezó una serie de movilizaciones que no tregua durante varias semanas. Hubo manifestaciones y encierros en el edificio municipal de Campillo del Río. Francisco Jesús Carretero, uno de los componentes más señeros de la plataforma subraya que la clave del éxito radica en la forma de organizarse. “Peleamos por un objetivo común, sin que interfirieran diferencias ideológicas”, explica.

El representante recuerda que uno de los problemas de fondo era que la Diputación y la Subdelegación del Gobierno “se tiraban mutuamente la pelota” al no ponerse de acuerdo sobre la titularidad del vado y, por tanto, sobre quién debía sufragar el coste del deseado puente. No obstante, los vecinos destacan que, finalmente, se logró una victoria decisiva, al incluir el entre provincial en sus presupuestos la intervención, a pesar de que fue necesaria una modificación del proyecto que supuso un encarecimiento sustancial, hasta acabar en un desembolso próximo a 1,6 millones de euros.

A pesar de que la ejecución se demora —de acuerdo con Carretero las últimas previsiones apuntan a septiembre de 2017 como fecha de ejecución—, los vecinos de Campillo del Río consideran que lo más complicado ya está hecho y que el puente se construirá más pronto que tarde. Con él se acabarán situaciones de peligro —que, por suerte, no han causado víctimas— entre quienes se atrevieron a franquear el Guadalquivir en días en los que las aguas bajaban bravas.

Ahora, la esperanza de los usuarios de la carretera es que los políticos cumplan sus promesas. “Todo el conflicto era cuestión de sentido común y de atender una reivindicación justa”, apunta Carretero, quien nunca olvidará el mes tan intenso que hizo que un grupo de personas sencillas se convirtiera, a diario, en foco de la noticia.