Cuando la generosidad y el altruismo se llevan en vena
El empresario de Arjona Gabriel Sola Segovia recibe el Premio Solidaridad
Aquellos que piensan que un empresario no puede ser solidario, que son conceptos radicalmente opuestos, se equivoca. Y el ejemplo vivo de ello es el arjonero Gabriel Sola Segovia. Un hombre que siempre —y para cualquier persona— tiene a punto una sonrisa sincera en la cara. Propietario y gerente de ese referente en la hostelería que es el Pub Nono’s desde hace un cuarto de siglo, su inquietud natural lo llevó, en el año 1995, a fundar, junto a un grupo de amigas, el primer equipo de fútbol femenino del municipio. Algo inimaginable en aquella época, casi una locura, que, sin embargo, no deja de dar frutos. En la actualidad, la Asociación Deportiva Pub Nono’s de Arjona es un espejo en el que se miran otros clubes femeninos. Pero, con el Premio Reino de Jaén-La Campiña, lo que la empresa Guillermo García ha reconocido en Gabriel Sola Segovia es su solidaridad. Una generosidad y una tendencia a entregarse, desinteresadamente, a los demás que el arjonero sintió “desde joven”. Tal vez, porque —como explicó—: “Nací en una familia humilde”.
“Lleno de ilusión y de entusiasmo” por el premio, Gabriel Sola Segovia calificó de “distinción hermosa ser abanderado de la solidaridad”, porque —indicó—: “Hablar de solidaridad es hablar de valores, sentir al prójimo como tuyo”. Y advirtió: “La solidaridad no caduca. Con empeño todo se puede”. El arjonero confesó haber sentido siempre una inclinación natural a “ayudar a los desprotegidos”. Pero quiso reconocer: “Este premio es tanto mío como de la gran cantidad de colaboradores y voluntarios que he tenido para hacer realidad los sueños de los más necesitados”.