Cómo ligar en tiempos de Tinder

Las nuevas tecnologías transforman la manera de relacionarse entre las personas

    14 feb 2019 / 09:45 H.

    Una mirada furtiva al chico que hay al otro lado de la barra en el bar o una sonrisa tímida para esa muchacha que agacha la vista cuando sus ojos se cruzan con los tuyos. Parece ser que no están las cosas para convencionalismos en esto del ligoteo 3.0. La era de las nuevas tecnologías llega para cambiar también las formas de relacionarse que tiene la sociedad.

    Tinder, Badoo o Lovoo, es un largo listado de aplicaciones en las que encontrar el amor, o al menos intentarlo. Con la foto del sujeto en la pantalla, uno decide si deslizar el dedo hacia el lado derecho —en caso de que hayas tenido un flechazo— o hacia la izquierda —si al verlo piensas que no está hecho para ti—. Entonces surgen los “match”, que se dan en el momento en el que los dos usuarios de la aplicación dieron el visto bueno al perfil del otro, por lo que se abre una ventana para chatear y compartir datos, fotos e intereses para comprobar si tienen algo en común, o por el contrario deben seguir buscando al amor de su vida entre likes, clicks y comentarios en las redes.

    Ya no se liga como antes y eso es una realidad innegable. Casi todo se hace a través del móvil y con una conexión a internet. Así, hay otras aplicaciones que te dan información de a qué distancia está el sujeto. Todo un avance, o un atraso, según se mire, puesto que en ocasiones se pierde el encanto de una primera mirada, los gestos y las formas de comunicación no verbal, elementos que quedaron relegados a si nos gusta o no lo que vemos en una simple imagen.

    Aunque, por otro lado, habrá algún perezoso que piense que se ahorra el vestirse y salir para, al final, regresar a casa como casi todos los días, igual de solo que cuando se despertó de la siesta y la idea de salir de farra le rondó la cabeza vagamente. En definitiva, habrá opiniones para todos los gustos. En lo que sí coinciden las autoridades es sobre el peligro de este tipo de aplicaciones por la posible presencia de perfiles que no son reales y con intenciones que van más allá de conocer a otras personas, echar un café o charlar mientras dan un paseo. Las nuevas tecnologías, por si no habían revolucionado suficientes cosas en el mundo, ponen patas arriba las formas de entablar una amistad, conocerse o ir más allá.

    Algunos estudios apuntan que el ritmo de vida y la rutina diaria hacen incompatible, por tiempo, que se ligue como antaño, pero seguro que se puede sacar un hueco para salir a tomar una caña y entablar conversación con el chico o la chica más guapa del bar. Al fin y al cabo, dos maneras de ligar que conviven en la sociedad de hoy y que no parece que vayan a desaparecer en la del mañana.