La Guardia Civil no registró la nave por falta de indicios
Mariano Rajoy felicita a Javier Jambrina por la investigación desarrollada
El coronel jefe de la Comandancia de A Coruña, Francisco Javier Jambrina, reiteró que la nave de Asados, la parroquia de Taragoña en la que fue hallado el cadáver de Diana Quer, no se registró porque “no había indicios racionales de que allí hubiera pasado nada”, pese a estar situada a escasos metros del principal sospechoso y ahora autor confeso del crimen, José Enrique Abuín Gey, alias “el Chicle”. Así se ha pronunciado en declaraciones a los periodistas después de mantener una breve conversación con el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, quien le ha felicitado por la investigación de este caso, que llevó el pasado viernes a la detención del principal sospechoso y el domingo fue localizado el cuerpo sin vida de la joven madrileña, desaparecida desde el 22 de agosto de 2016.
Jambrina, que este martes explicó detalles de la investigación en una rueda de prensa en A Coruña, estuvo ayer miércoles en el acto de inauguración de la ampliación de la capacidad de la autopista AP-9 a su paso por Santiago, donde ha intercambiado unas palabras con Rajoy, acompañado por otros cargos y en presencia del delegado del Gobierno en Galicia, Santiago Villanueva, y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, entre otras autoridades. Cuestionado a continuación por los medios de comunicación sobre por qué no se registró la nave en la que se encontró el cadáver, indicó que “se trata de una propiedad privada y no había indicios racionales de que allí hubiera pasado nada”. “Entonces no se puede entrar en una propiedad privada simplemente porque está abandonada”, apostilló. A preguntas sobre si será posible determinar si Diana Quer sufrió una agresión sexual, comentó que “eso es un problema médico-forense”. “Policialmente no es posible, salvo que lo diga él”, añadió, antes de apuntar que desde el punto de vista médico-forense desconoce “si eso va a ser posible o no”.
Por otra parte, indicó que supone que “en los próximos días” el juez titular de la investigación “llamará” a “el Chicle” y le tomará declaración, “y ahí es donde puede que amplíe detalles”.
Por último, el coronel jefe de la Comandancia de A Coruña señaló que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, le ha expresado “su satisfacción” por que se haya “solucionado este caso”. “Hemos conversado un poco sobre cómo son estos casos y el impacto que tienen en la familia, y lo aliviados que se sentirán de que todo haya finalizado”.
El juez del Juzgado de Instrucción Número 1 de Ribeira que ha reabierto la causa sobre la joven madrileña Diana Quer cita a declarar hoy jueves al autor confeso de la muerte de la chica, José Enrique Abuín Gey, conocido como “El Chicle”, que se encuentra en la prisión de Teixeiro, y a su mujer en calidad de investigada. Según informaron fuentes judiciales, el juez acuerda como diligencias a practicar en el momento actual la toma de declaración en condición de investigada de la mujer de “el Chicle” R.R.F., quien quedó en libertad tras declarar en la Comandancia de la Guardia Civil de A Coruña, así como la incorporación a la causa de sus antecedentes penales. Además, acuerda la declaración en calidad de testigos de dos personas. Y, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 505.6 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, al encontrarse el investigado José Enrique Abuín Gey en situación de prisión provisional, señala que “procede oír al investigado asistido por su letrado”. Esta comparecencia está prevista para hoy, a las 11,00 horas. La reapertura del caso esta motivada por las últimas investigaciones policiales practicadas, “se desprende la existencia de nuevos elementos fácticos que corroboran los indicios anteriormente existentes respecto a la posible comisión de un delito de detención ilegal”. El juez subraya que existen “indicios de la comisión de un delito de homicidio o asesinato”, al haber sido hallado el cadáver, y que “existen indicios respecto a la posible comisión frente a la misma de delitos contra su libertad sexual”.
La Ley de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género define esta como la que perpetra un hombre sobre una mujer con la que ha tenido una relación de pareja o sobre los hijos de ella, de modo que otros tipos de machismo violento reconocidos en el Convenio de Estambul, como los asesinatos perpetrados por desconocidos, –el caso de Diana Quer, por ejemplo– no se consideran de esta tipología, aunque el Pacto de Estado propone algunos cambios: Elaborar leyes específicas y mientras tanto, incorporarlos a las estadísticas.
Este fue uno de los principales caballos de batalla de la negociación del Pacto de Estado contra la Violencia de Género y ha sido el centro del debate desde que la Ley Integral cumplió 10 años, ya que la ONU instó al Gobierno a reconocer esos otros tipos de machismo violento que sí constan en el mencionado convenio del que España es parte: mutilación genital femenina, matrimonio y esterilización forzosos, trata, explotación sexual y acoso y agresión sexual. De acuerdo a las fuentes consultadas, el principal motivo es que si se incorporan a la ley estas formas de violencia, sus víctimas tendrían derecho a recibir la misma protección que se contempla para quienes padecen la violencia de género en el ámbito de la pareja. Esto plantea un doble problema: Que las medidas contempladas pueden no responder a las necesidades específicas derivadas de cada delito y que los recursos son limitados cuando no insuficientes para atender a las mujeres que ya están amparadas.