Un exigente empate para el Linares Deportivo

Chico ya había avisado en rueda de prensa que el Linares se enfrentaría el domingo al equipo que practica mejor fútbol de la categoría. El Huétor Tájar llegó a Linarejos con una idea muy clara comandada por su técnico Germán Crespo y la motivación que supone superar al líder hace siete días. Y tras el cierre de la jornada, el cuadro granadino dio la razón a todo esto. El Linares sacó un meritorio empate si bien el ida y vuelta en el que se tornó el choque en el tramo final podría haber decantado la balanza para cualquiera.

El técnico azulillo repitió el esquema que tan buen resultado le dio frente al CD Rincón, con un 4-4-2 que juntó varias novedades tanto por decisión técnica como por lesiones. Sergio García formó como acompañante de Admonio en la zaga mientras que en medio campo Pablo y Sergio Ortiz fueron la pareja en la sala de máquinas. Arriba Pekes y Pablo Aguilera repitieron como dupla de ataque y sus figuras sirven para explicar gran parte del transcurso del partido. A sabiendas de que el rival siempre intentaría sacar la pelota por abajo, la elección del doble 9 buscó duplicar la presión arriba para complicarles la tarea. La solución de Germán Crespo resultó eficaz pues bajó a Heras entre centrales para ganar superioridad y minimizar riesgos. Así, la primera parte fue de mayoritario dominio visitante y en el minuto 27 llegó el gol de Hernández tras un disparo ajustado desde la frontal. El esfuerzo azulillo sin balón supuso un desgaste importante y eso se notó a la hora de atacar. Con balón echó en falta mayor juego entre líneas por lo que Chico intercambió las posiciones en banda de Braim y Barba sobre la media hora para que Jorge, partiendo desde la izquierda, pudiera llegar por dentro y enlazar con la delantera. El equipo sacó fruto pronto y el propio Barba empató el choque en el 38’ tras un rechace del portero en el área. Los minutos finales del primer tiempo coincidieron con el mejor tramo local y tanto Pekes como Pablo pudieron hacer el segundo.

El paso por vestuarios prosiguió la tónica del primer acto y el cansancio hizo mella en los de Chico, que notaron la ausencia de Juanfran y su robo de balón, pues las posesiones rivales se alargaron y el cuadro local no conseguía cortarlas. Sin embargo la entrada de Siles ayudó a cambiar el chip del partido. El extremo salió muy activo y desde su desborde en banda metió al Tájar cada vez más atrás. La grada olió sangre y el conjunto visitante empezó a mostrar algo de nerviosismo en cada salida desde atrás. El Linares le obligó a buscar mucho más balón largo que en la primera parte por lo que la continuidad de sus ataques se redujo y los azulillos comenzaron a rondar las inmediaciones del área cada vez que tenían espacio para transitar. Pekes, Siles y especialmente Barba en un cabezazo rozaron el 2-1 aunque en el otro área Robador tuvo que comparecer para salvar un par de ocasiones. El choque terminó de mutar a un ida y vuelta cuando Omar entró al césped por Pablo Ortiz y el Linares rompió el equilibrio de su sistema en pos de la victoria. Con metros para correr cualquiera pudo erigirse vencedor pero el encuentro se cerró con la expulsión de Admonio y un empate que por méritos pudo ser justo. Chico puso fin a su andadura como interino devolviendo al grupo a un estado anímico muy mejorado. Si todo sigue los cauces esperados entre el hoy y mañana puede anunciarse el nuevo técnico.