Un adversario conocido

La historia se repetirá por tercera vez consecutiva. El Tecnigen-CTM Linares quedó emparejado en los cuartos de final de la Copa de Europa Femenina con el Grand Quevilly francés, con el que se enfrentó en una ocasión en octavos, en 2016, y la pasada campaña también en cuartos. En los dos precedentes fue eliminado el equipo que entrena Almudena Roldán. En el primero fue derrotado por 3-0 cuando en el Tecnigen militaban la rumana Melinda Ciurcui y las españolas Marta Pajares y Gloria Panadero. Más doloroso fue la situación que se vivió en el otro precedente, cuando se quedó fuera por la diferencia de puntos. En la ida perdió por 1-3 en la ciudad linarense y en la vuelta se impuso por 1-3, pero se tuvo que recurrir al coeficiente. Los partidos de esta temporada no tienen fecha fijada, pero otra vez el primero lo jugará en su pista el representante, entre los días 5 y 8 de diciembre, y la vuelta, del 13 al 15 del mismo mes. La rumana Roxana Istrate y la polaca Klaudia Kusinska, si no surge alguna lesión o descarte de última hora, tienen plaza fija. La incógnita, una vez más, será la tailandesa Orawan Paranang, que reapareció la pasada semana en los tres compromisos que disputó el Tecnigen después de participar en torneos con su selección. Su regreso resultó decisivo para eliminar al TTC Novi Sad de Serbia (3-0) y en el triunfo liguero en el Hotel Patria Chico de Priego de Córdoba (2-4), donde aportó dos puntos y medio. En la derrota frente al campeón UCAM de Cartagena fue la encargada de lograr la única victoria. Esteban Rodríguez, el presidente del CTM Linares, admite que desconoce si la palista asiática estará disponible para la eliminatoria. El Grand Quevilly francés mantiene el bloque de la pasada campaña y en su plantilla cuenta con la internacional española Galia Dvorak, la también internacional francesa Roza Soposki, y la china Jiaju Sun. En octavos superó con autoridad a las rumanas del ACS Dumbravita por un doble 3-0. Es un conjunto potente y la pasada campaña se plantó en las semifinales de la Copa de Europa, cuando se denominaba Ettu Cup.

Esteban Rodríguez, el presidente del club, reconoce las dificultades de la eliminatoria. “Conocemos el potencial del Grand Quevilly francés y sabemos de que habrá que luchar al máximo, pero ya la pasada temporada estuvimos muy cerca de superarlos en su pista”, revela.