Trece años de una gesta azul

Hoy se cumplen trece años de la consecución de la Copa Subdelegado por parte de CD Tugia. Los pealeños llegaban como favoritos tras competir ese año en Primera División Andaluza, ante el Betis Iliturgitano un club que siempre se había dedicado a la cantera y que contra pronóstico eliminó en semifinales al Villargordo de Juan Antonio Cañas. La temporada se avecinaba complicada para los pealeños, que volvieron a salvarse aunque no sin apuros del descenso en la última jornada ante el Linares B. Para inscribirse en la Copa Subdelegado contaron con el técnico Luis Melgarejo. Para alcanzar la final eliminaron a Huesa, Vilches y La Guardia. Sin duda, la eliminatoria más complicada fue la de cuartos de final ante el Vilches. El Tugia tuvo que disputar las semifinales contra La Guardia jugando en Santo Tomé como local. Allí defendió la renta obtenida en territorio guardeño. Sin embargo, la eliminatoria se resolvió en la prórroga con gol de Germán, que remató de cabeza un córner que evitó los lanzamientos de penalti. Para la preparación de la final, el equipo de Peal tiró de experiencia y concentró a sus jugadores en las instalaciones de La Garza. Allí analizaron la estrategia del rival gracias a la información que Manolo Castro como preparador había recapitulado presenciando la otra semifinal. Desde allí se desplazaron al municipal de Vilches, donde le esperaban cientos de aficionados pealeños.

El encuentro se tiñó de azul muy pronto gracias a un joven Javier Vitutia, Vitu que ya había realizado muy buena campaña en Liga. En el minuto 30 el delantero fue derribado dentro de área y la acción fue castigada con un penalti, que el mismo se encargó de transformar. En esa jugada, los iliturgitanos se quedaron con un hombre menos. Sánchez y el propio Vitu ahondaron la herida del conjunto de Andújar, con el 3-0 al descanso. Nada más reanudarse el encuentro, el CD Tugia aprovechó un contraataque para sentenciar la final con 4-0. Cualquier otro equipo hubiera pensado en echarse atrás y evitar la una goleada más abultada. Pero el Betis Iliturgitano no estaba ahí por casualidad y lo demostró recortando diferencias hasta el 4-2. El gol de Barja devolvió la euforia a la grada pealeña, pero el partido se había convertido ya en una lucha del que volvió a sacar provecho Vitu, que convirtió desde los once metros el 6-3 definitivo, marcando cuatro de los seis goles azules en la final. El torneo sirvió al delantero de trampolín a la Tercera división, donde más tarde demostró que su récord anotador no era casualidad. Jugó en el Linares, Martos CD, Real Jaén o Mancha Real.