Moción de censura al Real Madrid

Los blancos ofrecen una pésima imagen ante el Shakhtar Donetsk y empiezan con derrota el torneo

22 oct 2020 / 10:38 H.
Ver comentarios

El Real Madrid hincó la rodilla ante el Shakhtar Donetsk (2-3) para comenzar, por primera vez en su historia, perdiendo en la Liga de Campeones, además de hipotecar el pase a la siguiente ronda y de afear aún más su imagen antes de disputar el Clásico del próximo sábado. Todo son malas noticias en Valdebebas. Segunda derrota consecutiva, tres goles encajados y sin patrón de juego. Zidane, su alineación, y este versión pobre del Real Madrid recibieron una moción de censura en toda regla.

La noche comenzó con varios avisos de los ucranianos antes de que llegara la primera puñalada. El mensaje fue claro, el experimento de Zidane con sus delanteros Rodrygo y Jovic no sirvió. En defensa, un coladero constante con Varane y Militao compitiendo por ver quién concedía más metros al rival y en el centro del campo, agua, pese al músculo acumulado con Valverde y Casemiro. La apuesta de Zidane fue justo la contraria a la que demandaba el guión, sobre todo por la reciente derrota ante el Cádiz. El técnico francés recogió cable al descanso, confirmando que Jovic no vale para ser delantero del Real Madrid, ni un apático Rodrygo, que estuvo lejos de la frescura que desprendió la temporada pasada. Cualquier jugador del Castilla merecería también las mismas oportunidades. Pero hasta que Zidane despertó, el roto fue enorme, una paliza sin paliativos tras una primera parte primorosa de los ucranianos en el peor momento posible para el Real Madrid, a tres días de jugar contra el Barça. El único que estuvo a la altura fue Thibaut Courtois, decisivo para mantener con vida a los suyos, incluso en la segunda mitad. Marlos se topó con el belga en un clarísimo mano a mano y Tetê —minutos después— no falló con un zurdazo raso y duro al que no pudo llegar el meta blanco. Cuatro minutos después llegó el 0-2. En la segunda parte Zidane movió ficha. No le hizo falta saber que el Real Madrid jamás había perdido 0-3 al descanso en toda su historia en la Champions League para meter un par de sustituciones. La vergüenza era tan evidente que los cambios se hicieron solos.

Deportes