Misión cumplida en Granada con una contundente victoria

Goleada del Jaén Paraíso Interior al Sima de Peligros

11 dic 2019 / 11:20 H.
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Pronóstico cumplido y clasificación para los octavos de final de la Copa del Rey, un torneo en el que el Jaén Paraíso Interior ha sido subcampeón en las dos últimas ediciones. La Final a Cuatro ya está a dos eliminatorias después de solventar con claridad el debut ante un voluntarioso Sima de Peligros (0-5). Daniel Rodríguez dio descanso a Fabio, Piqueras, Campoy, con unas molestias, y Alan Brandi, aunque apostó por un equipo competitivo para evitar sorpresas de un rival dos categorías por debajo. Carlitos sigue su idilio con el gol y el gaditano enseñó el camino de la victoria con el cero a uno, pero no estuvo del todo cómodo el equipo en este periodo. Se contagió del juego local y no aprovechó las cinco faltas a los siete minutos. Todo lo contrario, porque noventa segundos después se equilibró el número y los colegiados cortaron de raíz cualquier situación y los conjuntos se cargaron de faltas. Carlitos, esta vez de doble penalti, situó un tranquilizador cero a dos. En la recta final surgió la figura del meta Germán, que ofreció un catálogo de paradas que evitaron más tantos en contra en el Palacio de los Deportes. Roberto Gozi tuvo una noche más tranquila y exhibió seguridad en cada llegada granadina.

El segundo tiempo fue un monólogo amarillo en un escenario imperial y al que regresó después de las semifinales de hace un año y medio ante el Movistar. Ángel Bingyoba mereció el gol en dos ocasiones consecutivas. En la primera Rafi salvó en la misma línea y en la otra su balón se estrelló en el poste. Dani Martín y Antonio Pérez resolvieron el partido y la eliminatoria con goles en una secuencia de dos minutos. La misión estaba cumplida a y pensar ya en el importante partido del viernes en el Pabellón Anaitasuna de Pamplona ante el Osasuna Magna. El Sima utilizó a Kiko como portero-jugador y esa temeridad le costó el quinto gol, anotado por Míchel a falta de unas décimas para el final de un encuentro en el que Granada vivió una auténtica fiesta con más de 4.000 seguidores.

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