Tambores de guerra azulillos

Pedro Sáez vive sus momentos más difíciles como presidente del Linares y su continuidad en la entidad no está segura, ya que su gestión ha sido especialmente cuestionada durante el último año, en el que se han dado a conocer escándalos de tal gravedad como el supuesto desfalco en las arcas azulillas. Esta situación motiva que un grupo de socios impulse una moción de censura para que Pedro Sáez abandone el cargo y convoque elecciones con el fin de elegir una nueva junta directiva. La iniciativa de los socios no está presentada oficialmente, pero sí cuenta con el número de firmas para llevarse a cabo a partir de la próxima semana. El grupo intentó cerrar un acuerdo para que la salida del actual presidente fuera de manera serena y sin dramatismos, es decir mediante una transición tranquila para no dañar más la imagen del Linares desde el punto de vista institucional. Es más el grupo de socios, del que se sabe, según fuentes consultadas, que está formado por gente joven, titulados universitarios, aficionados de varias generaciones y con experiencia en gestión y administración de empresas, argumenta que intentó por todos los medios mantener en silencio la moción para no enturbiar el ambiente deportivo en las vísperas del partido más importante de la temporada ante el Cacereño, en el que el conjunto azulillo se juega la permanencia en Segunda B

Pero fue la propia directiva, a través de uno de los vicepresidentes, Javier Gómez, quien confirmó en los micrófonos de Cope Jaén, que la iniciativa se impulsa, aunque solo falta presentarla oficialmente. De este modo, a partir del lunes, si no hay un cambio de opinión, se abrirá una nueva etapa en el club con un proceso desconocido hasta ahora en la historia del Linares —en sus distintas denominaciones—, ya que ningún otro presidente se había enfrentado a una situación igual. Pedro Sáez llegó a la presidencia poco después de la refundación de la entidad azulilla y tras sustituir en el cargo a Francisco Romera. Desde entonces, ha ganado todos los comicios celebrados sin apenas oposición, el último de ellos en julio de 2015 con el equipo recién ascendido a la categoría. Ha sido en el último año cuando su gestión se pone en entredicho, debido a infinidad de problemas internos tanto de contabilidad —hay una investigación judicial abierta contra el extesorero, Antonio Zapata— como de la propia marcha del club. Ese malestar se puso de manifiesto en la última asamblea en la que se le pidió su dimisión y la de sus compañeros de junta directiva. El grupo de socios lamenta que el asunto de la moción haya salido a la luz en el peor momento e insisten en que su propósito era posponerlo hasta después del trascendental partido del domingo ante el Cacereño. En este sentido, hacen un llamamiento a la afición azulilla para que deje a un lado las tensiones con la directiva y se centre en animar a los hombres de Antonio José García Muñoz, “Torres”, ya que argumentan que lo más importante en estos momentos es salvar al Linares en el ámbito deportivo.

¿Qué opina Pedro Sáez? El presidente se muestra tranquilo y solo tiene la preocupación de que el equipo salve la categoría. El dirigente reconoce que este grupo de socios cuenta con el número de firmas para presentar la moción de censura. “Me considero una persona querida por la masa social, pero es cierto que este grupo de socios quiere presentar una moción de censura”, comenta. El dirigente asegura que la familia le ha aconsejado que deje el cargo. “Yo no vivo del fútbol y mi gente desea que abandone el Linares. No tengo claro que este grupo de socios gane la moción, pero vamos a esperar a que la presenten”, espera. Sáez mantuvo, la pasada semana, una reunión con las personas que reclaman su marcha. “En ese encuentro me pidieron que dimitiera para facilitar una transición tranquila, pero yo les dije que estaba centrado en lograr la salvación”, acaba el máximo dirigente.