Jonathan Rosales rescata al Linares con dos penaltis

Empate a domicilio con sabor a victoria para un Linares Deportivo que se vio envuelto en un partido trampa en el Miguel Moranto ante un CD Huétor Tájar inferior durante los noventa minutos, pero que mostró una pegada espectacular consiguiendo colocarse con un sorprendente 2-0 antes de cumplirse de la media hora. Antes y después de eso, los jiennenses dominaron con puño de hierro pero su poca efectividad en el remate final casi les condena a la derrota. Sin embargo apareció el capitán Jonathan Rosales para empatar con dos goles desde el punto de penalti. Destacar que el partido estuvo marcado por la lluvia, pero también que los locales malograron una pena máxima con 2-1 en el marcador y que jugaron el último cuarto de hora con nueve hombres por sendas expulsiones. El encuentro comenzó a ritmo alto, pero con los granadinos muy replegados en busca de seguridad defensiva. El Huétor Tájar demostró su respeto al líder del grupo con un puesta en escena bastante conservadora y un sistema táctico de claro carácter defensivo, los locales no arriesgaron lo más mínimo pues querían evitar a toda costa encajar un gol tempranero que les pusiera el resultado cuesta arriba a las primeras de cambios.

Así, todo el planteamiento entrenado durante toda la semana bien se pudo ir al traste en segundos porque en el primer minuto de partido el Linares Deportivo ya contabilizó su primera llegada, a cargo de Alan con un buen disparo que puso a prueba al portero rival. Los jiennenses presionaron bien la salida de pelota rival y no tardaron en hacerse con el control y la posesión del cuero, tampoco en acercarse con peligro. En el ocho Josema estaba a punto de marcar con la testa a la salida de un saque de esquina, pero la pelota se fue arriba; mientras que cumplido el cuarto de hora Dani Espejo probaba fortuna con otro lanzamiento lejano que detuvo un portero bien situado. Al cancerbero local se le acumulaba el trabajo y poco más tarde salvaba a los suyos con una gran intervención a remate de volea Josema en otro córner botado por Rodri. Los visitantes controlaban el partido con puño de hierro pero los locales llegaron por primera vez a portería rival y consiguieron marcar. Un gol a cargo de Eric que llenó de júbilo a la grada de un incrédulo Miguel Moranto. El tanto encajado fue un mazazo para un Linares Deportivo que había estado dominando de forma clara pero que en los siguientes minutos quedó casi grogui, un desfallecimiento fatal porque cinco minutos más tarde de recibir el primer gol veía como le hacían el segundo por mediación otra vez de Eric.

Duramente zarandeados, los jiennenses respondieron esta vez enrrabietados volcándose sobre la portería rival con más corazón que cabeza. Superada la media hora Alan pudo recortar distancias con un disparo desde el interior del área que el portero local abortó con una parada que se llevó muchos aplausos y que, sin duda, le convertían en el gran protagonista de la tarde. Pero poco más tarde no podría hacer nada ante el especialista desde los once metros y capitán Jonathan Rosales, que no falló una clara pena. Con el partido jugándose en el límite de lo anímico, el Huétor Tájar el que gozase de un nuevo penalti para hacer el tercero, de Jonathan Rosales sobre Manu Daza. Sin embargo el portero azulillo Samu Urbano consiguió detener el lanzamiento en dos tiempos.

A la vuelta de los vestuarios en el reinicio el Linares deportivo salió dispuesto a conseguir lo que no había logrado en la primera, culminar mejor sus oportunidades y no ceder tanto atrás. Así el técnico azulillo movió su banquillo con la intención de aportar más empaque al centro del campo, algo que no tardó en producirse. Durante muchos minutos el Huétor Tájar logró sobrevivir pero a un cuarto de hora para la conclusión su mejor efectivo, su portero Migue García, fue expulsado con roja directa en una acción que también suponía una nueva pena máxima cometida sobre Joan Grasa, la tercera del partido y segunda de los visitantes. El especialista Jonathan Rosales no falló y anotó el empate.