El hambre verde se come a un Real Jaén conservador

Ganó el que más lo buscó y el que puso más juego en el Estadio de La Juventud en un partido de alto voltaje y que mete de lleno al Atlético Mancha Real en la lucha por el play off de ascenso a Segunda División B. Los verdes completan una segunda vuelta espectacular, con solo una derrota y tres empates en los partidos disputados. Es un equipo que ha cambiado y que tiene las ideas claras. Le gusta proponer en el campo, pero también se mueve con comodidad cuando el partido requiere un fútbol directo. Cada futbolista conoce su función en el esquema de Manuel José Moreno, “Rizos”, y esos automatismos los pusieron en práctica frente a un Real Jaén que aún depende de sí mismo para optar a las eliminatorias, aunque vio frenada su racha de seis victorias consecutivas. Después del carrusel de altas y bajas hasta el 31 de enero, el equipo está cogido por alfileres en el centro del campo. Andrés García Tébar no dispone de un centrocampista organizador que imponga jerarquía a la hora de distribuir y filtrar un pase a los dos puntas. La lesión de Cervera es importante y la falta de ese faro que encienda la luz de las ideas se notó en el Estadio de La Juventud. El equipo se puso el mono de trabajo, aunque para puntuar en este tipo de campos y superficie hay que arriesgar más. Esa falta de ambición influyó en la derrota. Se optó por el músculo y potenciar el juego aéreo para contrarrestar a Óscar Quesada, Pedrito, Joaquín García y Manu Garrido. El Atlético Mancha Real tuvo más la posesión y buscó el área de un seguro Luis Arellano desde el minuto uno. Nando, un puñal por la banda izquierda, hizo trabajar al meta hispanovenezolano, al igual que Manu Castillo y un batallador Vitu. El Real Jaén no dio señales de peligro en este periodo. Estuvo encorsetado y parapetado atrás. Su sensación de peligro llegó con algunas acciones aisladas de Juan Carlos. Migue Montes fue un llanero solitario en este periodo. Pedro Beda tuvo que sacrificarse en defensa y cerrar las líneas de pase por la banda de Higinio Vilches. El resultado era lo mejor de un periodo de mayor dominio de los locales. El Real Jaén salió con más decisión en el segundo periodo y la ocasión de Juan Carlos fue un ejemplo. Los blancos buscaron aprovecharse del desgaste local, pero el Atlético Mancha Real pretendió seguir en la misma línea. En una asociación de Nando llegó el gol de Manu Castillo. La mitad de La Juventud estalló de júbilo y la otra enmudeció, aunque solo por dos minutos. La estrategia es un arma en la que el Real Jaén siempre genera peligro. A falta de fútbol, la pizarra permitió soñar con un resultado positivo. Falta y remate perfecto de cabeza de Migue Montes. El poceño emergió entre una nube de jugadores. Empate y partido nuevo. El colectivo que dirige Rizos acusó el gol, unido a una fatiga por el trabajo realizado. El Real Jaén sí buscó ahora la meta de Lopito, pero le faltó más decisión. Cuando gobernaba el partido se produjo la acción del penalti. El colegiado no la vio, pero a instancia de su auxiliar penalizó la acción con la mano de Ismael Heredia. Apenas quedaban seis minutos más el tiempo añadido. El Atlético Mancha Real intentó parar el partido, la intensidad subió y los hombres de García Tébar buscaron a la desesperada el empate y gozaron de una clara doble ocasión cuando el partido ya agonizaba. Manolillo, en otra falta, remató de cabeza al palo con Lopito ya batido. El posterior rechace lo mandó fuera Migue Montes. No hubo tiempo para más. El Atlético Mancha Real se engancha otra vez a la lucha por el play y el Real Jaén continúa tercero, pero ve reducido su margen de error con la derrota. El domingo tiene una final con el Almería B en el Estadio de La Victoria (18:15 horas).