Humberto Janssens corona La Mota
El piloto hispanobelga gana dos de las tres mangas y revalida la victoria del pasado año

Humberto Janssens mantiene su idilio con la Subida de Montaña a La Mota al revalidar el título en la cuarenta y tres edición de una prueba tradicional y que este año fue puntuable para la Copa de España, Campeonato de Andalucía y la Copa Diputación Provincial de Automovilismo. El piloto hispanobelga, a los mandos de un Porsche 911 GT3, dominó dos de las tres mangas oficiales con un tiempo global de 4 minutos y 56 segundos, dos segundos menos que el alcalaíno José Antonio Romero, con BRC 205T, que luchó por el triunfo hasta el final una vez que ganó la primera ascensión con una marca de 2:27.
Los dos primeros clasificados triunfaron en casa al competir con la licencia del Motor Club Alcalá. El podio lo completó José Manuel González, con un Porsche 911 GT3 CUP, y un tiempo de 5:13. Mientras, Adolfo Gutiérrez, del Clásicos Alcalá, fue cuarto con un Renault Clio RS R3T y un registro de 5:27, y Mario Martínez, compañero de escudería, cerró el top 5 con 5:32, una vez que fue segundo en la anterior edición.
En la categoría de monoplazas el triunfo en la Subida a La Mota correspondió a Christian Erik Broberg Muñoz, hijo de la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz, que dominó con un Wolf GB08 F Mistral y una marca final de 5 minutos y 3 segundos, con Damiá Bernat, segundo, con 6:03 y un Speedcar GT1000. Este último es un piloto habitual del Campeonato de España de esta modalidad.
Un total de 27 vehículos terminaron la carrera alcalaína, una de las más longevas de Andalucía, después de los cuatro abandonos que se produjeron entre las dos sesiones de entrenamiento y las tres subidas oficiales. Fueron Mikel Moreno (Mitsubishi Lancer Evolution IX), Antonio David Marchal (Mitsubishi Lancer Evolution X), Adrián Cano (BMW 323 TI) y José Manuel Montenegro (Renault Clio RS 2.0). La 43 edición se disputó en un trazado, de 4.300 metros, que discurrió entre las carreteras JA-4307 y JV-2238, ofreciendo un desnivel de 280 metros y una pendiente media del 5,5 por ciento. Un recorrido técnico y exigente que puso a prueba tanto la potencia de las máquinas como la habilidad de los pilotos participantes.
A la entrega de premios asistieron Alberto Rivera, presidente del Motor Club Alcalá la Real; Mercedes Flores, primera teniente de alcalde del Ayuntamiento y diputada provincial; Belén Ramírez, concejal de Deportes, y Baldomero Andréu, edil de Educación y Empleo. Todos ellos destacaron la importancia y la tradición de la Subida a la Mota. “Una vez más fue un éxito y estamos contentos por el nivel de los pilotos y la repercusión alcanzada”, dijo Ramírez.