Entre las mejores palas

Tiene 39 años, pero la velocidad y los reflejos de un chaval. Agustín Aranda vive un momento dulce después de ser convocado recientemente para la selección jiennense de pádel. Se trata del primer alcalaíno que lo consigue. Con el combinado provincial jugó una ronda de partido en Málaga. Se siente muy contento con la experiencia y está dispuesto a recibir la llamada del entrenador, Juan Ortega, tantas veces como sea necesario. Este es el colofón para una carrera destacada. “Estoy muy contento”, resume.

Aranda empezó a practicar el deporte de las palas hace seis años, cuando se federó. Desde muy joven había jugado al tenis y el bádminton, deportes que le sirvieron para tener una buena base. De hecho, se muestra orgulloso de que todo lo ha aprendido con la práctica, sin ir a ninguna escuela o academia. Su secreto para mantenerse en forma radica en la actividad física constante, de manera que solo descansa un día a la semana. Suele salir a correr en compañía de amigos.

El guardia civil suele tener como pareja al cordobés Rafael Parra, al alcaudetense Rafael Bellido o a Daniel Muñoz, número dos de Jaén. Con su equipo, Entrena2, disputa la Primera División Provincial, categoría en la que se proclamaron campeones. Además ganó compeonatos en Úbeda y Villa del Río (Córdoba). Ahora prepara la nueva temporada, que empezará este mes. En sus planes se encuentra participar en numerosos torneos, entre ellos uno de ámbito regional previsto en Fuengirola (Málaga). Agustín Aranda cuenta con dos patrocinios, el de Indoor Pádel Alcalá la Real, que le facilita la equipación, y el de Las Negras, de Almería, que se encarga de las palas. Por otro lado, al llegar a los cuarenta años supondrá el comienzo de una nueva etapa en su trayectoria, pues debe dar el salto a la categoría de veteranos. Lo ve como un reto, ya que su deseo pasa por militar en la selección de Andalucía. Para ello intentara prepararse con ilusión. El alcalaíno —número 5 provincial y 55 de la región— considera que el pádel es un deporte en auge en la provincia de Jaén. Valora que cada vez hay mayor cantidad de personas que lo practican, muchas de ellas federadas, de modo que, desde hace tiempo, dejó de ser una disciplina minoritaria. También es consciente de que el nivel sube, sobre todo entre la juventud, que viene pisando fuerte.