El cariño de Rus a Juan Palomares tras su fichaje por el Mirandés
El portero ruseño recibe un homenaje en su casa ante cientos de vecinos que le brindan su apoyo

A gritos de “Juanpa, Juanpa” recibieron esta los vecinos a Juan Palomares a su llegada al Ayuntamiento de Rus. El joven guardameta ruseño acaba de dar el salto al fútbol profesional tras su flamante fichaje por el CD Mirandés, equipo que estuvo a tan solo un paso de ascender a Primera División y que volverá a militar este curso en la categoría de plata del fútbol nacional.
Una auténtica hazaña deportiva dentro del municipio de La Loma, que ha querido homenajear a su paisano con un cariñoso acto en la Plaza de la Constitución en el que han participado cientos de vecinos. Sin apenas dar abasto para saludar a los suyos, Juan Palomares consiguió adentrarse en la primera fila de las butacas, rodeado de su familia y “escoltado” por un nutrido grupo de chavales que forman parte de las categorías inferiores. Es un ejemplo para ellos y, consciente de esta responsabilidad no elegida, se muestra con los pies en el suelo a pesar de haber cumplido el sueño de todo niño amante del fútbol.
“Cuando tenía su edad me dedicaba a divertirme con mis amigos, a pasar un buen rato, a estar en mi casa y a sacar el colegio adelante. Entonces, el fútbol era una diversión, llegarán a donde tengan que llegar porque el tiempo lo pone todo en su sitio, pero mientras, el deporte debe ser para divertirse y echar un buen rato con tus amigos”, aconseja.
En el acto estuvieron presentes Juan Ignacio López, alcalde en funciones de Rus; Juan Antonio Palomares, segundo teniente alcalde (además de padre del deportista); y Rafael Franco, concejal de Deportes. Todos ellos, junto a otros miembros de la corporación municipal, hicieron entrega a Palomares de una placa conmemorativa de Rus, así como de una bandera del municipio, en un acto cargado de fuertes emociones. Palomares, que ha estado a punto de conseguir el ascenso a Segunda División con el Mérida este curso, se muestra cercano, humilde y contento de dar este paso en su carrera mientras los suyos le empujan a alcanzar sus metas.